-Llévame contigo - escribió Emilia en un papel -no tengo nada que hacer aquí...nada me ata a esta ciudad.
-El amor te ata a esta ciudad-dijo sin Max sin mirarla mientras cerraba la segunda maleta.
- Te seguiré de todos modos...quiero viajar contigo para conocer otro tipo de magia, siento que aquí no aprenderé mucho...
- ¡No mientas! - contestó enojado, Emilia se sobresalto, se dio vuelta hacia la puerta del cuarto cuando Max la tomó del brazo acercándola hacia él.
- Tu quieres huir de Joaquín pero no te llevaré conmigo porque tu lugar es aquí, me cuesta decirte todo esto, créeme que me duele dejarte y no llevarte conmigo - juntó su frente con la de ella y rozando sus labios ambos quedaron en silencio varios segundos y por un instante Emilia tuvo la certeza de que podría amarlo con locura si Max se lo permitía.
-No lo permitiré - Max tal vez adivino su pensamiento luego la abrazó, Emilia sentía la calidez de su cuerpo - eres mi otra parte pero le perteneces a Joaquín, él te ama como no ha amado a nadie más y odio admitirlo pero...- suspiró y acarició su rostro - ni siquiera yo podría superar la felicidad que el te brindara, tienes que volver con el.Ambos quedaron abrazados por cerca de una hora o mas, finalmente Max se separo de Emilia y fue a llamar por teléfono. Emilia pensaba en huir, era verdad pero no soportaba estar lejos de los seres que amaba. Max tenia razón, no seria feliz lejos de su hogar, de la ciudad y menos sin Joaquin, pero todavía no tenia cara para hablar con el.
Cenaron en silencio hasta que la hora llego, camino al aeropuerto Max no dejaba de enviar mensajes de texto, Emilia quería preguntar a quien le escribía pero no quería ser una metiche en su vida y en sus cosas.
Cuando llegaron al aeropuerto fueron a tomar un café.
-Prométeme, no, júrame que después de salir de aquí iras a ver a Joaquin para estar con el y no volver a separarse jamás - los ojos de Max estaban tristes y Emilia asintió no muy convencida...
Se abrazaron por ultima vez, Max tomo el avión rumbo a su destino, a escribir su propia historia, una historia tal vez no tan dolorosa como la de Emilia o como la de tantos hechiceros que han conocido la cara de la verdad y la muerte. Emilia afuera del aeropuerto soltó varias lagrimas en silencio, tomo un taxi y una hora mas tarde estaba abriendo las puerta de su departamento, se llevo una enorme sorpresa al ver a Axcel parado en medio del living con sus brazos abiertos y encima de la mesa una botella de vodka y dos vasos.
- ¡Bienvenida mi ángel precioso! - Emilia sonreía mientras corrí hacia el, Axcel la abrazo mientras ella lloraba como una niña pequeña, Axcel la dejo que botara todas las lagrimas que llevaba adentro y que tal vez querían salir hace mucho, se sentaron en sofá y bebieron un vaso de vodka, Axcel encendió un papelillo, le dio la primera bocanada y se lo entrego a Emilia.
-Ten - le dijo - te hará bien - Emilia negó con la cabeza y solo bebía vodka - Emilia debes estar con ese hombre, te ama y esta incompleto sin ti así como tu lo estas sin el.
Axcel la tomo de los hombros y la miro a los ojos
- Hoy es el cumpleaños de Joaquin...esta en su casa con sus amigos, lo veo muy triste...y solo...tal vez este sea su ultimo cumpleaños aquí...lo veo irse de viaje para nunca mas volver...si lo dejas ir sus vidas quedaran inconclusas...
Emilia fue a su cuarto, cerro la puerta y se sentó apoyada en ella, no quería dejar ir a Joaquin pero no se atrevía a verlo a la cara, había pasado mucho tiempo desde aquella noche...la noche en que seria la mas feliz de su vida y resulto ser un infierno.
Pero Axcel tenia razon...no podía dejar nada inconcluso. Salió a la calle a caminar un poco, caminaba sin parar, se detuvo en una cafetería, salió de ahí, miro la hora, era temprano aun tenia tiempo pero estaba asustada.
"TIENES QUE VOLVER A SER FELIZ...BUSCA LA FELICIDAD EN LAS COSAS SIMPLES..."
-¿Las cosas simples?...no entiendo...
"SOLO MIRA A TU ALREDEDOR"...
Emilia miro al frente y sus ojos se llenaron de lagrimas al ver el parque en el que una vez, quizás hace mucho tiempo paseaba tomada de la mano con Joaquin, se sentó en la misma banca en que una vez comieron salchichas, termino su café y corría hacia la fuente de agua...necesitaba sentir a mi guardiana cerca, cuando llego, se sentó en la orilla y se quite las sandalias, puso sus pies adentro y contemplando la luna se quede ahí, la lluvia comenzó a caer y su corazón se tranquilizo por completo. Pasaron un par de horas cuando tomo la decisión, salió del parque detuvo un taxi y fue rumbo a la casa de Joaquin, cuando llego habían muchas personas, Emilia caminaba nerviosa hacia la biblioteca, sentía que hablaban, otros la miraban asombrados o con desprecio pero no le importaba, solo quería llegar donde Joaquin.
Llego al salón principal, Joaquin estaba conversando con algunas personas, Emilia recién se había percatado que era una fiesta en extremo elegante, que todos estaban vestidos de etiqueta y la mujeres, mas bien modelos de alta costura, vestían hermosos vestidos de diseñador, en cambio ella vestía un traje de lino azul con flores blancas y su pelo estaba enmarañado por el viento y la lluvia, no le ayudaba el haber llegado toda empapada desde la calle pero no le importaba, ya estaba ahí.
Todos se quedaron en silencio, Joaquin volteo y me quedo mirando, Emilia abrió la boca para hablar...pero ningún sonido salía, solo lagrimas de impotencia ya que no podía decirle a ese hombre de ojos azules lo que sentía, lo miro a los ojos y las voces hablaron:
"DEJA FLUIR TU ENERGÍA...EL AMOR DE TU OTRA PARTE TE HARÁ HABLAR..."
Emilia se entrego a la orden de las voces y apenas volvió a abrir la boca...las palabras comenzaron a brotar