Parte 3: Capitulo 10

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Gangnam–gu, 10:50 am

19 de Febrero. 

Sera esperó pacientemente en la sala de estar mientras Soomin, la secretaria de Jung Hoseok le servía una taza de té. Usualmente ella no esperaría por nada y mucho menos por nadie pues su tiempo era valioso, pero debido a la importancia que le había dado el detective a que se reunieran lo más pronto posible, decidió que podía esperar. 

La joven secretaria llego con una fina taza de té y lo sirvió con gran maestría; Sera, quien había vivido rodeada de gente educada en el arte del té podía reconocer sus habilidades, y Soomin le llamo la atención por ello. La única vez que la había visto fue aquella vez que entro a esa oficina por primera vez y la secretaria había intentado detenerla, cosa que obviamente no logró. Sin embargo no parecía haber resentimiento en su rostro, como pasaba con muchas secretarias o asistentes personales quienes se tomaban a pecho si pasaban por sobre de ellas. Soomin, por el contrario era un libro herméticamente cerrado, con perfecta etiqueta, modales envidiables para muchas que trabajan en el mismo campo y eficiente, incluso Sera podía ver lo eficiente que era con solo verla moverse sin dejar de atender su trabajo ni un segundo. 

Era sencillamente envidiable, pensó Sera. Su propia asistente era buena, mas carecía de carácter y era insegura, una mirada suya y la podía ver temblar. Además de que se mordía las uñas cuando estaba estresada. En comparación Soomin era envidiable, alguien tan capaz que trabajaba para un hombre como Jung Hoseok casi parecía una pérdida de talento. 

-¿Te gusta tu trabajo, Soomin? - dijo Sera poniendo la taza de té en sus labios poco después, sin dejar de observar a la joven asistente. 

-Me gusta trabajar para el Sr. Jung. - contesto en cambio y Sera amplio una leve sonrisa tras la taza. Era obvio que la mujer vio atreves de su pregunta. 

-Entonces el Sr. Jung debe tener mucha suerte de tener a alguien como Soomin para apoyarlo. - 

-Creo que la que tuvo suerte soy yo, Srita. Kang. - 

-Aunque en lo personal creo que te está desperdiciando solo teniéndote manejando su agenda. - dicho eso, Sera dejo la taza de té abajo.  - Pero estoy segura de que hay lugares donde podrías desarrollar tu completo potencial. - 

-Le agradezco sus halagos, Srita. Kang, pero estoy donde quiero estar. - Dijo Soomin, su rostro seguía hermético como una pared de hierro. Sera no pudo evitar desearla más. 

-Incluso la lealtad es algo difícil de encontrar estos días. - Dicho eso cruzo finamente sus piernas y miro a Soomin con una sonrisa. - Hace que a uno le den ganas de corromper a una persona tan recta. -

-Dudo mucho que la señorita haya venido aquí solo para seducir a una simple secretaria como yo para abandonar a su jefe. - Soomin miro directamente a los ojos de Sera sin amedrentarse, irguiéndose alta y firme como un gran roble que no se doblega ante nadie. 

-Soy muy buena haciendo múltiples tareas. - respondió Sera. 

-Al igual que Soomin, por ello Srita. Kang, apreciaría que dejara de intentar robarme a mi indispensable asistente. - Una voz masculina sonó desde la entrada de la habitación y al voltear, un alto y escultural hombre caminaba hacia ellas en un traje marino con destellos turquesas se acercaba a ellas con pasos estilizados. 

Soomin quiso sonreír como saludo pero se abstuvo ante la presencia de la invitada, no quería darle ningún tipo de indicio de nada en absoluto. Después de todo ella trabajaba con Jung Hoseok, era imprescindible ser capaz de reconocer depredadores con solo una mirada, y esa joven heredera era un tiburón blanco en su mejor momento. 

-No me puede culpar por intentarlo. - Dijo Sera sonriendo con una entretenida sonrisa de derrota. 

-Por supuesto que no. Yo haría exactamente lo mismo en su lugar. - Hoseok respondió con una sonrisa que no dejaba ver cuál era su verdadero estado de ánimo. -Libera mi agenda del día, Soomin, por favor. - pidió acercándose a la puerta, su asistente inclino levemente la cabeza en señal de entendimiento. -¿Me acompaña? - pregunto cordialmente a Sera quien solo se levantó con elegancia y camino tras él. 

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