|Sexo por Amor| Christopher Vélez

Capítulo 16

Mientras Diego y su papá arreglaban los últimos detalles antes de empezar a grabar, yo me quedé parada junto a Abraham, quien tan amablemente no dudo en hablarme tan normal, como sino hubiera un línea que separa a un artista y una modelo o un fan, no es que eso me importara, pero si había trabajado con artistas que tienen muy planteada esa línea.

- Ya sé de donde te he visto antes - Dijo de repente.
- ¿A mí? - Lo mire confundida, vaya que me había sorprendido su comentario.
- Sí, a ti, ___ Bloson, eres amiga de los chicos de CNCO, ¿No es así? -.
- ¿Cómo lo sabes? -.
- Son también grandes amigos míos, te he visto en las fotos que publican y sus historias - Explicó.
- Vaya, ellos me hablan de ti pero la verdad no creí que me prestaras atención - Dije sincera.
- Bueno, con muchísimo respeto, debes saber que eres realmente una mujer muy atractiva, imposible que la gente no note el acto de tu presencia -.

Ambos reímos.

- Eso me halaga viniendo de ti, ¿Quién diría que Abraham Mateo pensaría eso de mí? Ni en mis más locos sueños - Mencioné divertida.
- No me cuesta nada aceptar la verdad, espero que podamos coincidir más veces, aunque no sea solo por trabajo - Sugirió.
- Mm, me parece muy bien, suena interesante, realmente espero que sea así -.

El señor Gerardo llamó nuestra atención avisándonos que ya íbamos a comenzar.

(...)

Había llegado la parte del beso, yo tenía que estar todo el tiempo coqueta hacia Abraham, ese era mi papel, digamos que yo era una mujer que hacía trabajos clandestinos que había robado su corazón, pero por ser tan coqueta y alocada, a él le costaba trabajo conseguir mi amor, nuestros cuerpos permanecían bastante pegados en la mayoría de las tomas, y ahora que llegaba el beso se suponía que él estaría parado detrás de mí mientras tomaba mi cintura y acariciaba la piel de mi brazo desnudo, me daría la vuelta y bom, nos besaríamos, y eso fue lo que pasó.
El beso era rápido y salvaje, lleno de adrenalina, el primer beso con alguien que no conoces es extraño, pero al menos yo trato de hacer que jamás lo olviden, aunque sea con artistas que quizá jamás volveré a ver, esto forma parte de mi esencia.

- Y corte - Dijo el señor Gerardo logrando que nos separaramos - Muy bien a los dos, ___, de verdad estabas preparada, te veo en mi oficina cuando te cambies, es todo muchachos, excelente Abraham -.

Cómo todo se había grabado en el mismo set aunque con algunos escenarios diferentes, el video se había terminado de grabar este mismo día, a las 3 de la mañana, claro, pero era necesaria la noche.

- Un mega placer trabajar contigo - Me dijo Abraham con una sonrisa.
- Eso lo digo yo, todo una maravilla poder ser parte de ésto que seguro es un éxito - Respondí.
- Haces un trabajo increíble ___, lo recomendaré sí o sí, pero evita besar tan bien por favor -.

Yo reí y tomé su mano.

- Muchas gracias de verdad, encantada de aceptar tu ayuda, y no prometo nada, digamos que no es algo que pueda controlar -.

Ambos reímos y nos miramos a los ojos.

- Ya va, eres una súper persona, suerte que tienen esos chicos que te ven a diario -.
- Pues el día que se puedan juntar contigo, estaré ahí de nuevo - Aseguré - Me encantó conocerte y trabajar contigo, debo irme, es tarde y debes estar cansado -.
- Eso espero, pero ¿Sería mucho pedir si me pasas tu número? - Me miró expectante.
- Mm, bueno, solo cuídalo como yo al tuyo -.

(...)

Había terminado de cambiarme, ya estaba cansada, lo único que quería era dejarme caer en la cama y dormir profundamente hasta la próxima semana.
Tomé mis cosas y salí del pequeño camerino.
Caminé hacia la oficina del señor Gerardo y toqué la puerta.

- Adelante - Me dijo.

Abrí sin más y entré, encontrándome con Diego y su papá.

- Siéntate ___ -.
- Gracias -.

Lo mire esperando que hablara.

- Honestamente me encantó el trabajo que hiciste en el set, Abraham quedó bastante satisfecho con el resultado y en verdad te digo que todos los años de preparación han valido la pena al cien por ciento - Comenzó a decir con una sonrisa mientras sacaba algunos papeles de un cajón.
- Muchas gracias señor Gerardo, ha sido un verdadero placer haber podido trabajar con usted, y por supuesto que con Abraham -.
- ¿Yo quedo de lado? - Diego llamó mi atención abrazándome por la espalda.
- Claro que no, reconozco que sino fuera por ti, quizá tu papá estaría hablando en este instante con otra persona - Acepté.
- Yo sabía que contigo íbamos a obtener mucho, y de verdad fue espectacular verte trabajando, aunque el beso, ese beso no me gustó nada - Mencionó con disgusto en el rostro.
- ¿Por qué no? - Pregunté riendo levemente.
- Oye, apenas conoces a Abraham y ya lo besaste, ¿Sabes cuánto deseo esa suerte que ha tenido? -.

El señor Gerardo y yo reímos, vaya, ahora sí que me había sorprendido, que lo dijera delante de su papá era algo que se podía distorsionar por no saber si solo era broma o lo estaba diciendo de forma real.

- ¿Ah sí? La verdad es que no sé que decirte - Confesé.
- ¿Qué les parece si yo termino con ___ de ver lo que tengo que decirle y después ustedes dos hablan? - Propuso el señor Gerardo con diversión en sus palabras.
- Creo que sería lo más correcto - Dije.

Diego asintió resignando y se sentó a mi lado.

- Bien ___, quiero que le entregues estos papeles a Belén, tienes una referencia de mi parte que te va a llevar a poder postularte para trabajos mayores que impliquen mejores beneficios en muchos sentidos, quédate con este sobre, son copias que deben estar bajo tu poder, me gustaría que trabajaras en muchos más proyectos para mí, ¿Qué te parece? -.
- Vaya, me deja sin palabras, le agradezco demasiado esta grandiosa oportunidad, le aseguro que para mí es un placer y mega honor trabajar para usted, encantada -.
- Me alegra escuchar eso, entonces seguimos en contacto, Belén estará al tanto para saber que debe hacer, gracias por aceptar ___ -.
- Al contrario, muchas gracias a usted -.

Yo me levanté y le di la mano al señor Gerardo.

- Ve a descansar, bien hecho -.
- Hasta luego, gracias por todo - Y salí de su oficina con Diego tras de mí.