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Despierto sobresaltada ante el odioso sonido de la alarma y como puedo intento apagarla.

-¿Por qué hay que despertar tan temprano? - murmuro algo molesta.

-¿Casi cuatro meses viviendo juntos y aún no te acostumbras, mocosa?

Me volteé para mirarlo y pude ver como sonreía divertido.

-Son las 7:00 AM y entramos al trabajo a las 9:00 AM, ¿cuál es la necesidad de despertar 2 horas antes, cuando puedes levantarte solo 30 minutos antes de ir al trabajo?

-Puede ocurrir algún contratiempo, nunca se sabe cariño.

-Jamás nos ha ocurrido ningún contratiempo - tomé una pequeña almohada y se la lancé a la cara.

-Te arrepentirás de eso, mocosa - se posicionó sobre mí y comenzó a hacerme cosquillas sin piedad.

-¡No! ¡Basta, por favor! - chillé entre risas.

Se detuvo tras lo que me pareció una eternidad y luego me miró fijamente a los ojos con una enorme sonrisa en su rostro. Se acerco hacía mi y comenzó a besarme dulcemente. Lentamente el beso fue subiendo de intensidad y terminamos deshaciéndonos de nuestros pijamas poco tiempo después.

Me senté a horcajadas sobre su regazo y comencé a besar sus labios desesperadamente. Una de sus manos me tomó de la nuca suavemente y ladeo un poco mi cabeza para poder depositar besos sobre mi cuello. Comencé a mover mis caderas lentamente sobre su erección que cada vez crecía más, lo que provocaba que pequeños gemidos se escaparan de los labios de Levi.

-¿De este tipo de contratiempos hablabas? - pregunté divertida.

Levi sonrió y atrapo nuevamente mis labios con los suyos. Con un rápido movimiento quedé debajo de él, y este empezó a masajear mis pechos y a depositar besos por mi cuello. Bajó su mano hasta llevar a mi pelvis, me miró a los ojos buscando el consentimiento para seguir, por lo que asentí torpemente. Introdujo uno de sus dedos en mi interior y un pequeño gemido se escapó de mis labios. Lentamente comenzó a mover su dedo dentro de mí y poco tiempo después introdujo otro.

-Ya estas lista, mocosa - sonrió complacido y sacó un pequeño sobre de su mesita de noche. Se colocó el preservativo y luego se posicionó sobre mí.

Lentamente comenzó a envestirme, acelerando el ritmo de a poco. Sentir a Levi dentro de mí era algo tan fascinante, que estaba segura que jamás me podría cansar de sentirlo.


-Aún tenemos 30 minutos de sobra - me quejé mientras subíamos al ascensor del edificio.

-¿Tu jamás dejas de quejarte, cariño? - preguntó fingiendo estar irritado.

-Sabes que no - respondí mientras una amplia sonrisa aparecía en mi rostro, lo que provocó que soltará una pequeña risa.

-Te amo ___(tn) - tomó mi rostro entre sus manos y me besó.

-Y yo a ti Levi - le devolví le beso.

-Recuerda que hoy debo quedarme a una reunión y luego tengo una cena de negocios, no olvides pasar a despedirte de mí - volvió a besarme.

-No te preocupes, no me olvidaré - le sonreí.

Salimos del ascensor y Levi me acompaño hasta mi despacho.

-¿No te veré hasta el sábado en la tarde, verdad? - preguntó triste.

-Cariño, aún tenemos el almuerzo por delante - me reí - me volverás a ver hoy.

-Sabes a qué me refiero - dijo mientras entrábamos a mi despacho.

-Sí, volveré mañana por la tarde - le acaricié la mejilla - No te preocupes, Armin y Annie cuidarán muy bien de mí.

Un amor inesperado (Levi x reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora