Un amor inesperado (Levi x reader)

20

Disfrutaba del familiar recorrido hacia el campus de la universidad. Ya me quedaban solo dos semanas de prácticas y tenía muchos informes que entregar, tanto para la universidad como para la empresa de Levi. En unos cuantos meses más ya estaría titulada y me sentía muy emocionada al pensar en aquello.

Entregué mis informes y me explicaron lo que debía hacer a continuación. Anoté todo en una pequeña libreta que siempre tengo a mano, ya que soy muy distraída y olvidadiza.

Repasaba mentalmente la conversación que había tenido con el encargado de mi nivel, cuando siento que alguien me toma suavemente del brazo.

-H-Hola, ___(tn).

-Hola, Eren - me volví a mirarlo y le sonreí sin mostrar los dientes.

-Hace casi dos meses que no te veía, ¿qué te trae por aquí? - preguntó algo nervioso.

-Oh, solo entregaba algunos informes de mis prácticas - dije restándole importancia - ¿y tú? ¿qué haces aquí en el campus?

-Tenía un reunión con el encargado de mi carrera..., pronto será la titulación - al sonreír se hizo más evidente lo nervioso que estaba.

Mientras nos poníamos al día sobre lo que había sido de nuestras vidas hasta ahora, nos dirigimos a la salida de la universidad y comenzamos a caminar en dirección a una heladería. Aún se me hace extraña la amistad que tenemos con Eren, porque yo sé que él aún tiene la esperanza de arreglar lo nuestro, y él sabe que yo he desechado completamente esa idea. De todas formas, él solo actúa como un amigo y no intenta nada extraño, cosa que agradezco un montón.

Una vez nos hubieron entregado los helados, nos sentamos en las mesas que estaban afuera del local.

-Bueno y... supongo que sigues con Levi, ¿no es así?

-Sí - respondí con el ceño algo fruncido. No entiendo a qué viene la pregunta.

-¿Les va bien? - bajó la mirada hacía sus manos.

-¿A qué te refieres con eso?

-¿Eres... feliz con él? - dejó de mirar sus manos y me miró fijamente a los ojos.

-Sí, lo soy - respondí sin vacilar.

-Me alegra saberlo - su labios sonrieron, pero sus ojos se veían tristes.

No supe muy bien qué decir a continuación y preferí quedarme callada, dejando que un incómodo silencio se apoderara de la situación.

-No quise incomodarte con mis preguntas - dijo Eren después de lo que me pareció una eternidad.

-No te preocupes, entiendo que... te preocupes por mi - dudé un poco ante las palabras que salieron de mi boca, no sé si son las más adecuadas.

-Sabes que aún te quiero, y que siempre me preocuparé por ti.

-Lo sé - bajé la mirada algo nerviosa - Gracias, Eren.

Minutos más tardes nos encontrábamos caminando por las calles de la ciudad. Eren me había pedido que lo acompañara a ver un traje formal para una exposición que tenía, y según él, quería dar una buena impresión.

Fuimos de tienda en tienda intentando encontrar el atuendo indicado. Mis pies me dolían de tanto caminar, pero Eren seguía sin estar a gusto con nada de lo que veía.

-¿Qué tal este? - saqué el traje del lugar donde estaba y se lo pasé a Eren para que lo viera con más detalle.

-Me encanta - la emoción se le notaba en la voz - Ven, acompáñame a ver cómo me queda.

Me senté en un pequeño sofá que estaba fuera del probador. Eren había entrado con tres trajes distintos que también le habían encantado.

Tomé mi teléfono y vi que tenía un mensaje de Levi y unas cuantas llamadas perdidas.

"¿La cena de esta noche sigue en pie?"

"¿Por qué siempre tienes tu teléfono en silencio, mocosa?"

"En fin, contéstame en cuanto puedas"

"Te quiero demasiado"

No pude evitar sentir un poco de culpabilidad. ¿Pero porqué sentía eso? No estaba haciendo nada malo, solo acompañé a Eren a comprar ropa.

"Lamento la demora en responder :("

"Obviamente sigue en pie, ¿por qué? ¿te surgió algún inconveniente?"

"Te quiero aún más"

-Si solo estás con tu teléfono dudo que puedas ayudarme demasiado - Eren estaba cruzado de brazos en la entrada del probador.

Puse los ojos en blanco y dejé mi teléfono de lado para mirarlo.

-Ese te queda bien, pero no me termina de convencer - comenté luego de analizarlo por unos segundos.

Luego de unos pocos minutos salió con el traje que yo había elegido y me tomé unos segundos para analizarlo.

-¿Y bien?

-Me encanta, resalta el color de tus ojos y te queda genial - le sonreí.

Después de probarse los tres trajes, se decidió por el segundo y procedió a pagar.

-Estoy agotada - me quejé cuando salimos del centro comercial.

-Lo siento, ¿quieres ir por unas hamburguesas y patatas? - me sonrió - Para compensarte por haberme acompañado.

-Esta bien - dije sin pensarlo demasiado.

Caminamos al lugar que siempre solíamos ir a comer y ordenamos hamburguesas con patatas, refrescos y unos batidos.

-Estuvo delicioso - me reí mientras acariciaba mi barriga.

-Si que lo estuvo - rió Eren.

Nos quedamos conversando unos minutos más mientras terminábamos los batidos.

El teléfono de Eren sonó y él lo sacó de sus bolsillos. Miró lo que supuse era mensaje y tecleo una rápida respuesta.

-Dios, la estoy pasando tan bien contigo, no me quiero - bufó.

-¿Te surgió algo? - pregunté.

-Sí, dentro de dos horas debo juntarme con mi madre. Lo había olvidado completamente, que bueno que me lo recordó. No quisiera tener problemas con ella - sonrió mientras pasaba la mano por su cabello.

-Mándale mis saludos - le sonreí.

-Lo haré - noté como se ruborizaba levemente.

Pedimos la cuenta y a pesar de las insistencias de Eren, dividimos el pago.

Salimos del local de comida y nos quedamos parados unos segundos sin saber muy bien qué decir.

-Ha sido agradable pasar este rato contigo - le sonreí, pero Eren no me miraba - Mm...¿sucede algo? - lo miré extrañada.

-¿Ese de ahí no es Levi?

Mi corazón comenzó a latir rápidamente y la culpa volvió a inundarme.

Me volteé lentamente para mirar en la misma dirección en que lo hacía Eren, y en cuanto lo hice me arrepentí de haberlo hecho.

En la acera de enfrente esta Levi abrazando a Mai.