Capítulo 26: Movimiento de apertura

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Disclaimer: tortura gráfica

Un golpeteo constante y nervioso estaba empezando a sacar de sus casillas a Levi Heichou, que no había dormido ni un solo minuto desde el día anterior. Shasha Browse golpeteaba la tierra seca con una de sus flechas de manera distraída pero constante. Sentados en claro del bosque, cerca del pequeño riachuelo, el capitán y sus subordinados esperaban pacientemente a la vuelta de Armin, Jean y Mikasa que habían ido a por las provisiones necesarias para esconderse durante un par de días a la ciudad. De repente, el rumor suave de tres pares de pasos acompasados se hizo claro sobre la hierba y Levi Heichou giró la cabeza hacia su dirección antes de que las figuras encapuchadas de sus subordinados aparecieran entre las ramas espesas de los árboles. Connie Springer observó al hombre menudo en silencio, sin explicarse como había sido capaz de escucharlos antes de verlos.

- ¡Capitán!¡Ya hemos hecho las compras!—dijo el soldado Kisrtein mientras él y Mikasa dejaban las bolsas de alimentos junto a la piedra en la que Shasha seguía sentada golpeando la tierra distraída.—

- La Policía Militar nos ha dado esto.— susurró Armin entregándole un papiro con la cara del capitán chapuceramente dibujada sobre ella.— Si lo que pone es cierto, han disuelto los Exploradores. Los rumores en la ciudad dicen que por la tarde van a peinar las montañas, también van a colocar puestos de guardia en los caminos principales para que no pueda pasar nadie sin salvoconducto. ¡Capitán! ¿Qué hacemos?—

- Si no actuamos pronto, Eren...—susurró Mikasa Ackerman realmente preocupada con la información que acababa de escuchar.—

- Tranquilizaos. Van en coche de caballos y tardarán al menos un día en llegar a las tierras de los Reis. Tenemos que idear un plan de acción en ese tiempo.—ordenó el soldado más fuerte de la humanidad de manera cortante mientras leía el folleto completo que el chico rubio le había entregado unos minutos antes. Suspiró cansado unos segundos, levantó el papiro mirándolo a la luz del sol.— Es increíble como los dibujantes de la Policía Militar siguen siendo igual de ineptos que hace quince años, nunca consiguen dibujar mi nariz decentemente...—

- Capitán Levi, se oyen pasos.—interrumpió de manera nerviosa la chica de pelo castaño recogido en una coleta que había dejado de juguetear con sus flechas de repente.— Vienen hacia aquí.

- Armin, coge los cubos y colócate en la orilla del arroyo, llénalos de agua y espera a que los intrusos te apunten. Probablemente sean soldados de la Policía Militar empezando con la redada de la que hablabas.—dijo Levi Heichou levantándose enérgicamente, repasó con la mirada sus alrededores de manera rápida y se dirigió al resto.— Escondeos en los árboles contiguos, y preparaos para atacar, si se acercan a Arlet más de dos metros disparad a sus piernas, pero lo ideal sería que no tuviéramos que hacerlo o tendremos a toda la Policía Militar encima en cuestión de diez minutos.—

- Sí, señor.— Los soldados siguieron la orden de su superior, y, de manera ágil se encaramaron a los árboles cercanos con ayuda el equipo de maniobras tridimensionales.—

El rumor de dos voces conversando ligeramente invadió los oídos del joven capitán que observaba a las dos figuras encapuchadas y vestidas con el uniforme de la Policía Militar. Una muchacha de pelo pajizo y cortado a media melena un poco más alta que él mismo y un soldado muy alto de pelo negro cortado a tazón pasaron por debajo de la rama en la que se encontraba el soldado más fuerte de la humanidad. Ambos soldados, haciendo su trabajo, interceptaron el sonido del río, y después la figura menuda de Armin Arlet arrodillado en la ribera con los cubos.

- ¡No te muevas!— gritó el soldado más alto apuntando al cadete del Cuerpo de Exploración por la espalda.— ¡Date la vuelta lentamente!

Cuidadosamente, Armin levantó los brazos por encima de su cabeza muy despacio, enseñando las mangas azules oscuro de su camisa por los laterales de la capa; se puso en pie despacio y sin darse la vuelta. Al hacerlo la capa se enganchó en su equipo de maniobras tridimensionales, mostrándoselo así a la pareja de soldados que lo encañonaban por la espalda.

El verdadero corazón de la libertad (SNK fanfiction - Riren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora