Kimetsu No Yaiba! ||ONE-SHOTS||

Giyuu & Kyojuro

Un buen tiempo sin actualizar, buenas mi gente.

Si soy honesta, han pasado muchas cosas por acá, en esas bloqueo artístico, y más en este mes que toman exámenes, agradezcan mi tiempo, ahre.

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Ámame
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—Nunca pensé en ser popular. —habló sin mirar a los ojos.

—¿Disfrutas el hecho de mentir? Tus métodos son horribles. —mencionó el rubio. —Es porque obtendrás menos si no nos lo dijeras, ¿No es así maldita comadreja?

Apretaste los puños de furia, querías patear a aquel niño de secundaria. ¿Cómo se atrevía a tratar así a un maestro? Más si se trataba de tu amigo de la infancia.

Ibas a salir, pero el acompañante del otro gritó.

—¡Cállate ya, Zenitsu! Ya es bastante triste ver a Tomioka-sensei bastante solo, ¡Así que no necesita que lo hundas más! —te sorprendente ante aquel tacto, era cierto, pero seguía doliendo...

La sorpresa en el rostro de Giyuu fue increíble, te querías reír ahí mismo con todas tus ganas, pero significaría ser descubierta y que te llamen acosadora. Así que saliste como si nada hacia el maestro de Educación física.

—Me alegra no ser la única que note la popularidad de Tomioka-san, pero no era necesario ser tan... despectivo. —de ser seria a oscura en un solo toque hizo que el rubio se asustara. —Te llevas un reporte por tratar mal a tus maestros, Agatsuma Zenitsu.

—¡Fue mi idea! Yo le dije que...

—¿Cubriendo a tu compañero y mintiendo sobre algo que no se debe incumplir? Se llevan reporte los dos, espero ver a sus padres mañana. Ahora largo. —dicho y hecho, se fueron ambos estudiantes.

Suspiraste y volteaste hacia el maestro, este seguía comiendo su sándwich como si nada hubiera pasado.

Y fue ahí donde decidiste hablarle y conocerlo.

—Lamento lo que tuviste que ver, no suelo hacer esto. —hablaste apenada, él asintió. —¿Qué tal tu día?

—Supongo que bien. —habló seco, sonreírle era más para ti que para él.

Hubo un silencio desde ahí, ibas a volver a hablar pero llamaron a tu celular, aprendiste con mala gana ya sabiendo que era volver al trabajo.

—Fue un placer verte en persona, Tomioka-san, me retiro. —te fuiste.

Desde que te conocí, pensaba que eras igual al resto, igual de simple y que sonríe cuando le conviene. Algo en ti fue que llamó mi atención y que debería seguir viéndote al menos una vez por día.

Pero... siempre que intentaba acercarme, estabas cerca de ese rubio.

Puedo ver en tus ojos que te gusta Rengoku, ese idiota que contagia tu sonrisa. Siempre tan pegado a ti y tú no te alejabas, algo que siempre debiste hacer por tu bien.

Porque te amo.

Eres una tonta, es obvio que está enamorado de ti. Sin embargo estar a solas con él me ayudará a tener uno menos en el camino a tu corazón.

Eres mía, nada cambiaría eso... ♡

Los pensamientos de aquel adulto joven se volvían más oscuros y retorcidos cada que pasaba el tiempo, nadie se daba cuenta de eso, pues él siempre fue visto como el "crush" de las jóvenes en la academia Kimetsu.