Kimetsu No Yaiba! ||ONE-SHOTS||

Shinazugawa Genya [¡! Pedido]

Se acercan los 100k, no estoy preparada mentalmente. 🧍‍♀️

⚠️Advertencia⚠️: simple. 🤙

Pedido hecho por: karo_chan27 AAA

⚘ ⚘ ⚘

Saliste de tu casa cerrando con llave la puerta principal, emprendiendo tu camino a paso lento y perezoso. Eran las 6 de la mañana, hacia un frío que era insoportable, de todas formas prefieres morirte así que de calor.

Las clases debían empezar en una hora, tenías tiempo de sobra para tomar tu desayuno en pleno amanecer, ciertas calles de a poco estaban siendo llenas por autos y gente adulta yéndose a trabajar. Suspiraste, faltaban unas tres cuadras por llegar, al menos esta caminata te mantenía despierta.

-Por fin llegué, de nuevo. -sacaste el aire retenido de tus pulmones.

-¡Buenos días __________-chan! -saludó el maestro Rengoku con su sonrisa de siempre.

-Buenos días para usted también, Kyojuro-san. -hiciste una reverencia con tu cabeza.

-¡Espero hayas comido bien el día de hoy, siempre es importante! -recordó con orgullo, tú sonreíste.

-Gracias por preocuparse, ¡yo sí comí! Y espero que también usted. -lo señalaste en broma como si fuera un reproche, no mucho después rió.

-¡Claro que sí! Nos vemos en mi hora, ya va a tocar el timbre. -se alejó, yendo a la sala de maestros.

De cierta forma, su energía te contagió un poco.

Fuiste a tu salón, quedaban unos quince minutos para que ya dieran a empezar ese sufrimiento que tanto querías acabar, solo dos personas te agradaban como autoridad, y una no era ni maestro. Al ya entrar a tu aula, no tardaste en escuchar unos gritos de otros salones.

Te sentaste en tu lugar, viste de reojo a Tanjiro como ojeaba sus tareas preocupado, hiciste una mueca.

-¿Ni un "hola, cómo estás mi reina"? -hablaste curiosa, no mucho después te miró.

-Hola ___________-chan. -saludó al fin. -Perdón, no tuve tanto tiempo de organizarme y estoy casi perdido. -explicó apresurado, pronto empezaban las clases.

-Oh, perdón perdón, sigue en lo tuyo. -el chico agradeció en silencio, mientras te acomodaste.

En la entrada, notaste que Genya estaba parado ahí en silencio, te dio miedo a primera vista. Saludaste con una mano alzada, señalando el asiento al frente tuyo para que viniera.

Rojo hasta las orejas entró, estaba nervioso por estar sentado cerca de una mujer

-Se dice gracias, imbécil. -soltaste por su silencio, bromeando. -Perdón, no te enojes. -sacudiste su hombro.

-Gracias... y perdón, yo-... -interrumpiste, dando señal a que no importaba.

-De nadaaaa~, eres buen chico cuando quieres. -golpeaste su hombro en broma, este sonrió.

《⚘(.•᎑•. )⚘》

El receso había empezado, antes habías ido al baño para perder tiempo en una materia aburrida como contabilidad, para colmo tu profesor daba sueño. Tenías hambre por lo que decidiste apresurar el paso.

Al entrar, viste a uno de tus viejos amigos hablando con Tanjiro, escuchaste un poco de su plática mientras te acercabas a tu asiento, quedándote parada porque el rubio estaba casi sentado donde no debía.