Kimetsu No Yaiba! ||ONE-SHOTS||

Uzui Makio. [👭]

Porque amo a esta reina.
No sé bien cual es el apellido de Tengen, pero espero sea Uzui. D:

《♡》

Sentiste como te dejaban sobre algo cómodo y suave, hiciste una mueca de dolor, pues tus heridas seguían recientes.

—Gracias por cuidar de Makio, __________. —escuchaste una voz gruesa, la sentías alejada por alguna razón.

De ahí, no recordaste nada, te habías desmayado.

《◇》

Sentiste una punzada en tu brazo, abriste lentamente los ojos hasta poder distinguir todo tu alrededor, había una silueta frente a ti que captaba la mayoría de tu campo visual.

Oíste como una voz aguda dio un chillido y salió corriendo de la habitación, tú solo trataste de sentarte con cuidado. Tu cuerpo se encontraba bastante inmóvil, por lo que apenas te moviste, varios huesos tronaron.

No mucho después, reconociste el lugar en el que estabas, sonreíste aliviada de estar a salvo y... con vida.

—¡__________ despertó! ¡Está viva! —anunció la misma voz de hace unos momentos.

El ruido hizo que tú cabeza doliera, no tuviste una oportunidad para pedir que se calle. Unos segundos después apareció frente a ti otra cara sorprendida.

Era Tanjiro con una bandeja en sus manos, este tardó unos segundos no fue tan rápido como la doctora de la finca.

—¿Cómo te sientes? —preguntó Shinobu con una sonrisa.

—Bien, supongo, he estado aquí hace...

—Tres semanas si somos exactas, casi no comiste, pensábamos que habías muerto. Tu cuerpo tenía pulsos tan bajos que apenas lo sentía. —confesó con preocupación, tú solo la miraste.

—Entiendo —trataste de buscar unas sandalias para levantarte —. ¿Qué pasó con Uzui y sus esposas?

Su expresión cambió a una más tranquila, te alivió también. —Todas están bien, no sufrieron tantas heridas como tú, incluso te vinieron a visitar —pausó, tomando aire. —. Por cierto, Obanai hizo el favor de traerte cuando estabas inconsciente, dijo que habías sido muy fuerte comparada con otras veces.

Aquello te hizo sonreír, lo último te sorprendió uy en el fondo. —Sin dudas él puede ser muy amable, ¿qué hay de los hermanos Kamado? —comenzaste a tomar la medicina verde que estaba a tu lado.

—Nezuko ha estado ayudando mucho, incluso parece que quiere formular oraciones. —bajó la mirada con una sonrisa.

—Espera, me quiero levantar, me siento incómoda estando sentada.

—Eso no tiene sentido...

—Para mí lo tiene —dijiste en broma. —. Venga, ayúdame por favor.

No tenía otra elección, dio un suspiro pesado y tomó tu brazo para que te apoyes sobre ella.

—Bueno, también hubo alguien en específico que venía a verte siempre. —soltó la menor en su caminata.

Claramente llamó tu atención.

—¿Quién? —La miraste ansiosa.

—No tengo por qué decirlo —pusiste una mueca molesta. —. Está ahí, a tu izquierda. Mírala.

Hiciste caso, tus ojos se abrieron con una sorpresa inigualable. Sonreíste por inercia al ver que se acercaba con algo en sus manos.

—D-despertaste, me alegro mucho que estés bien. —te sonrió amable. —En verdad quisiera agradecerte por...