será un guardián?

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Las pecados capitales, son todos los males que uuna persona puede tener se devide en envidia, pereza, lujuria, gula, ira, avaricia y la soberbia.

Dicen que estos grandes males han existido desde que el primer hombre en la tierra.

Según dice que cada uno tiene una misión y es que los seres vivos caen en tentación, para que sus almas se manche, y se llenen de vicios, deseos, ambición y rencor, los cuales domina la mente de las personas.

Mansión de los kaioh

Llegando en uno de los autos, estaba un Haruka pensativo por aquella chica pelinegra, ya que le llamo la atención, pero sólo eso, ya que su corazón tiene dueño.

Y era su amada Michiru, que seguro le esperaba junto a Hikari, llenándose de emoción de verlas.

Asi cuando el auto llegó a la mansión, Haruka bajó y con ayuda de su chofer bajaron toda las cosas de la bebé.

Mientras tanto, percatandose de la llegada de que ea su futuro yerno por una ventana Ryoma fue a recibirlo, sin decir nada salio de la sala principal para dirigirse afuera.

Cuando tenia todas las cajas lista,  y se dirigió a la puerta para tocar el timbre  la cual se abrió y en ella, Ryoma salía para verlo.

Ryoma: como estas, Haruka.

Haruka: muy bien señor, solo he traido algunas  cosas para Hikari.

Ryoma: me dijieron que iban a traerlo.

Haruka: mi abuelo me aviso, asi que sin dudarlo, preferí entregarlos.

Ryoma: entiendo, entonces ven pasa le diré a alguien de los empleados que lleven los paquetes a la habitación.

Haruka: muchas gracias, disculpa puedo ir a verlas.

Ryoma: si, ven conmigo ellas estan en la sala con mi esposa.

En la sala estaba Michiru sonriendo a Hikari, ya que su madre le hacia reir, sin duda aquella bebé se sentía feliz ya que te todas la querían mucho.

En eso que estaban su atencion en ellas se dio cuenta que su padre venia, pero no estaba sola, ya que escucha otra voz que la conocía muy bien.

Asi que sus ojos se volvieron sobre la entrada de sala, en eso ve a su padre con Haruka, que venía con una sonrisa.

Que sin duda para Michiru, sabia muy bien que él, iba ser todo lo posible para estar juntos, asi que se levanta del sillón y va a saludarlo.

Dándole un beso en la mejilla, que para su amado no iba ser suficiente, pero debían hacerlos por sus padres, a la vez que Hikari volteó su cabecita y dando una sonrisa, y estirando sus brazitos donde su hermano mayor.

Haruka, viendo que su hermanita, hacía todo lo posible para llamar su atención y en especial que la carge.

Por su parte, Midori se sorprendió que su nieta ya reconociera sin dudas a su padre, y eso le alegraba.

Acercándose a ella, Haruka le estira sus brazos, y de inmediato Hikari las tomas con muchas ansias, y con algunos balbuceos, la bebe hablaba haciendo que todos sonríe.

Ryoma: sin duda, te extraña mucho.

Haruka: y yo a ella, mi bella Hikari.

Ryoma: puedes quedarte el tiempo que quieras.

Haruka: gracias.

Ryoma: pero ya sabes, que no debes pasar la noche aquí, hasta que tu y mi hija se casen.

Nunca me olvidesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora