Nunca me olvides

La gran batalla ha comenzado

La batalla final ya esta llegando, el mal ya ha dado el primer golpe, que pasará con nuestro guardianes.

En la cabaña

Escuchando aquella temible voz, Owen mira a Sora, la cual entiende lo que le quiere decir.

Ya que con ellos estaba Sakura, eso iba ser un punto débil para ellos, asi que debía a todo costa protegerla.

Owen: Sora, quedate con Sakura.

Sora: esta bien, asi lo haré.

Sakura: me opongo ambos deben ir a enfrentarlo.

Owen: pero vas a estar desprotegida.

Sakura: eso que importa, ustedes son un duo, tienen que trabajar en equipo.

Sora: esta bien, pero no salgas para nada afuera de la cabaña.

Sakura: descuide, voy a estar aquí.

Owen: entonces hay que pelear contra aquella sombra.

Sakura: tenga cuidado, ya que es uno de los generales más fuerte.

Owen: lo tendré en cuenta.

Saliendo de la cabaña, ambos mira al frente y ve a un hombre alto de pelo castaño y ojos rojos mirándolos.

Sintiendo algo de temor Sora pudo ver que era diferente a los demás slmbras que había luchado.

Ya que el poseía una armadura toda oscura y unas alas tambien oscuro, era sin duda el jefe de los siete generales.

Voz: por fin han salido de su escondite.

Owen: no estamos escondidos, solo que nos interrumpiste.

Voz: lo siento, dodne esta mis modales, y oara que vean que no soy grosero le diré quien soy.

Sora: no me digas que tienes nombrw.

Voz: por supuesto, y el mio es Adrastro comandante general de las 7 sombras y mano derecha del señor oscuro.

Owen: wow, impresionante.

Adrastro: veo que eres un chico algo engreído, pero voy hacer que te tragues tus palabras.

Owen: ustedes son unos fanfarrones.

Adrastro: te equivocas, a la diferencia del resto, me he dado cuenta de cada uno de sus movimientos y poderes.

Sora: no has estado espiando.

Adrastro: puede ser, pero como dicen sino sabes estudiar a tu oponente nunca ganarás(sonriendo).

Owen: eso lo vamos a ver.

Adrastro: pues adelante.

Sin esperar, Owen fue directo, dando sus mejores golpes y puñetes, los cuales fueron esquivado sin ningún problema.

Intentándolo de nuevo, Owen se dejó llevar, mientras su rival solo lo miraba, para esperar su momento.

Adrastro: viste, se todo tus movimientos

Owen: ya callate, aún eso comienza.

Adrastro: eres un chico por testarudo.

Owen: soy de esas personas que nunca se rinde.

Llendo donde él, fue recibido por un gran puñete en su estómago, que lo mando contra un árbol.

Quejándose de dolor, Owen fijo que venía hacía él, mientras que se tomaba con una de su mano su estómago.