𝙻𝙴𝚃'𝚂 𝙽𝙾𝚃 𝙵𝙰𝙻𝙻 𝙸𝙽 𝙻𝙾𝚅𝙴 - [𝙲𝙷𝙰𝙴𝙽𝙽𝙸𝙴]

CAPÍTULO 4

Haru Hwang en su quinto semestre de diseño de modas, era una de las chicas más populares de la universidad. Hermosa, inteligente y encantadora en toda la extensión de la palabra. También conocida por planear las más grandes, increíbles y siempre inolvidables fiestas, dónde todo podía pasar y pocas personas eran permitidas entrar y ser parte de aquella experiencia.

No es que Chaeyoung fuese una de esas personas exclusivas que tenían permitido ir a la gran fiesta, -su circulo de amigos constaba con menos de diez personas-, pero de cierto modo se había hecho amiga del mejor amigo de la anfitriona después de que este la ayudase un día a agarrar un libro en la biblioteca que ella aun con sus largas piernas no alcanzaba, y este la había invitado a su fiesta, probablemente con segundas intenciones.

Jennie por otra parte, conocía a la perfección a Haru. Eran amigas desde hace algunos años, compartían muchos gustos por la moda y la música, y sobre todo sus gustos sexuales, pues si, a Haru le gustaban las mujeres al igual que Jennie.

Por lo que no era de sorprenderse cuando Haru recibió a Jennie y a Chaeyoung -porque esta última, aunque no quería admitirlo, estaba nerviosa y no quería ir sola a aquella fiesta que iba de boca en boca por toda la universidad- con un beso en su mejilla, una mirada de pies a cabeza y un guiño de ojos mientras un halago hacia la castaña más baja entre ellas se resbalaba de sus labios sin descaro alguno.

-Jennie, amor, pero que bella estas. -sonrió coquetamente mientras pasaba su diestra por los delgados hombros de Jennie con parsimonia, tomándose todo su tiempo para echar hacia atrás un mechón de cabello que ocultaba una de sus exquisitas y tentativas clavículas. -Casi me dan ganas de comerte.

Jennie soltó una carcajada, para luego dedicarle una sonrisa coqueta. -¿Casi?

Haru rió entre dientes, su mano reposando en la muñeca derecha de Jennie y apretándola mientras que en sus ojos un brillo travieso crecía rápidamente. Para luego mirar la chica al lado de Jennie y sonreírle amablemente mientras fruncía levemente el ceño, pues no recordaba conocerla o haberla invitado a su fiesta.

-Hola, dulzura. ¿Te conozco?

De seguro que no la invitó ella, pues no olvidaría ese hermoso ángel.

Chaeyoung dejó de apretar sus puños y desvío todo pensamiento maligno hacia la chica que ahora la miraba a ella y no estaba comiéndose a Jennie con la mirada. Chaeyoung parpadeó y con esfuerzo le devolvió la sonrisa con falsa alegria.

-Hola, soy Chaeyoung.

Haru la observo fijamente, su sonrisa ensachandose al notar el tono de voz de la chica.

-Chaeyoung, que lindo nombre. Bueno, pasen, pasen.

Haru agarró la mano de Jennie y la adentró a la casa, con Chaeyoung siguiéndolas más atrás con su mano siendo rápidamente sujetada por la diestra de Jennie, quien volteó hacia atrás y le guiñó el ojo, para luego mirar hacia adelante y poner atención a la anfitriona, quien se estaba poniendo al día con Jennie mientras las dirigía a la mesa donde yacía toda clase de bebidas alcohólicas.