Pasaba sus ojos por las letras frente a ella pero no estaba leyendo y las palabras no tomaban ningún tipo de sentido, lo único que ocupaba su mente era lo dicho por Chiasa y su humor se estaba nublado al igual que el día anterior ¡a ella no le gustaban las mujeres! ¿Cuántas veces al día te repites esa frase? Con esa al parecer era la cuarta, ¡pero es que esa era la verdad!
Pensó en la condenada kunoichi, que por cierto NO LE GUSTABA, y la molestia por la escena con la directora de la academia se unió a su mal humor. Lo primero, con esa eran cinco veces, lo segundo ¿Por qué mierda le enojaba tanto que la mujer le coqueteara abiertamente a la castaña? No es como si a ella le gustara ¡ella tenía novio! Y de nuevo ¡a ella no le gustaban las mujeres!
Bien, seis veces y todavía no era siquiera el mediodía. Sacudió la cabeza, tenía que dejar de pensar en estupideces y concentrarse en su trabajo, no en una conversación con una completa desconocida que actuaba como si supiera todo de ella cuando la había visto por primera vez el día anterior habían tenido apenas un par de charlas. ¡Quién se estaba creyendo! A ella no le gustaban las mujeres, no le gustaba Tenten y no estaba celosa por lo que había pasado en la academia. NO, por supuesto que no. Inhaló y exhaló pesadamente, enfocándose de nuevo en las letras frente a ella, entre más rápido hiciera su trabajo, más rápido se iría y se alejaría de Tenten, ahora sí en serio.
A la hora del almuerzo salió a comer algo, la gastronomía local incluía bastante comida de mar aunque afortunadamente también había otras opciones. Estaba un poco más calmada y enfocada en su trabajo, porque esa era la mejor estrategia de todas, evitar que su mente divagara en temas insulsos al mantenerla ocupada. Regresó a su lugar y siguió leyendo, en una hoja iba anotando algunas cosas que iba encontrando y que le podían ser útiles, para compararlo después con los apuntes que había llevado preparados desde Suna y con sus propios libros de ser necesario.
Estaba concentrada cuando escuchó risas a lo lejos, una de esas la reconocía y levantó la cabeza antes que la puerta se abriera, frente a ella estaba Tenten con Aneko
- ¿Se les perdió algo? — preguntó de una vez
- Sí, tú — fue la pelirroja quien habló y ella trató de no fruncir el ceño — vamos a ir con Tenten a dar una vuelta para mostrarle la isla y ella insistió en venir por ti, Chiasa me dijo en donde encontrarte
- ¿Quieres venir? — la voz de la castaña era suave — la jornada de la academia ya terminó
- Pero la mía no, estoy ocupada
- ¿Puedo ayudarte en algo? — ella enarcó una ceja — o podemos esperarte ¿cierto Aneko-san?
- Ya te dije que es solo Aneko — le pareció ver que la mujer iba a volver a rozar el brazo de la castaña y esta disimuladamente se movía para evitarlo — si Temari dice que está ocupada no podemos hacer nada
- ¿Qué dices Temari?
- Vayan ustedes — sentenció, regresando su atención a las hojas para ignorarlas
- ¿Estás segura? — le parecía curiosa la insistencia de Tenten y la clara molestia de la pelirroja porque lo hiciera, asintió solo con la cabeza y le pareció verla suspirar — bien, suerte con tu trabajo
Las dos mujeres salieron y ella se quedó viendo la puerta permitiendo que su nueva confusión aflorara. La castaña había insistido en buscarla para que fuera con ellas cuando pudo simplemente no hacerlo y eso la alegraba de una forma inentendible, también a diferencia de la mañana la vio rechazar el acercamiento de la directora lo que extrañamente la calmaba y hacía que todo lo que internamente se había devanado pensando en lo que habría pasado entre pelirroja y Tenten desapareciera.

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Denuedo
FanfictionLa línea entre lo que era correcto e incorrecto se había vuelto difusa, tan solo le importaba lo que sentía sin tener en cuenta lo mucho que se repitiera en su cabeza que eso estaba mal. La historia no es NejiTen, tiene varias escenas con la parej...