Un amor sin escape #1 (Completa- Editando)

Capítulo 21 *

ALEXA

Restregué mis ojos con los huecos de mis manos, estaba con mucho sueño, pero había despertado porque estaba cayendo una tormenta muy fuerte, la ventana de mi habitación se había abierto y quedé despierta.

Camine hacia la cocina y agarre un vaso con agua, me relaje un momento y me quedé ahí, en medio de la oscuridad del departamento escuchando la lluvia caer.

Con Jake no he hablado desde que tuvimos esa extraña conversación en esa colina, nos pusimos algo intensos cuando discutimos antes de salir, pero juro que estoy haciendo un cambio por tratar de no perder la paciencia.

Simplemente estoy aturdida, agradezco que él siempre salga por su trabajo, pero es sofocante cuando llega y tengo que fingir que estoy cómoda con la situación.

Suspiré y dejé el vaso en su lugar.

Caminé nuevamente a mi habitación, no había prendido las luces, pero sentí la sensación de querer encender todo y quedarme en mi cama.

Y lo hicieron.

Lo escuché.

Me quedé helada.

Un toque en la puerta.

Era extraño que alguien tocara la puerta a esta hora, mire la hora en el reloj que estaba en la pared, las dos de la mañana.

¿Y si voy?

No, no, no, siempre pasa eso, alguien va alguien clava un hacha y muere. No quiero ese final.

Pero quiero saber, sí, por eso razón los curiosos son los primeros en morir.

Mire que bajo de la puerta se podía ver una sombra moverse, mi curiosidad me ganó y si muero sería una muerte como la de las películas.

Rápida y segura.

Me acerque sin hacer ruido y mire por la mirilla de la puerta, había alguien.

Oh, no, no, no.

Hay alguien tocando a las dos de la madrugada.

Estaba con una capucha vestido de negro y no sé si estoy viendo mal, pero traía una rosa roja, cuando levanto su cabeza observe que traía una mascarilla por lo que solo se miraban sus ojos.

Me alejé cuando supe que esa persona se dio cuenta que lo estaba viendo, la puerta tenía seguros, así que solo me alejé caminando hacia atrás, mientras que esa sombra se miraba moverse.

Camine rápido entrando a la habitación de Jake, él es el único con el que estoy, así que como instinto de sobrevivencia fui donde él.

Con mi corazón palpitando rápido subí a su cama y traté de despertarlo.

—Jake, Jake, Jake. —dije, nerviosa.

Él solo hizo un sonido de esta quejándose.

—Jake. —le volví a hablar.

—¿Necesitas algo? —escuche su voz ronca.

—Síííí.

—Alexa, ve a dormir.

—Por una perra sarnosa, Jake, levántate hay alguien en la puerta.

—¿Que? —se levantó preocupado.

—Hay alguien en la puerta, tocaron y mire que había alguien.

—¿Saliste?

—No, pero había una sombra, me acerqué para ver por la mirilla de la puerta y había alguien vestido de negro, traía una mascarilla oscura, no pude reconocerlo, creo que traía una rosa roja. Ve a ver.