Un amor sin escape #1 (Completa- Editando)

Capítulo 35*

JAKE

Mi cuerpo se tensa cuando escucho el disparo fuera de la iglesia, mi reacción fue cubrir a Alexa cuando la siento agarrar mi brazo.

—¿Que está pasando? —grito Marlon.

—Saca a mamá y a las chicas de aquí. —dije —Ahora.

—Alexa. —dijo Daniel, lo ignore, a ella me la llevo yo.

—Estará conmigo —dije —Váyanse de aquí.

—Cierren las puertas. —dijo Marlon. —Y tú deja de inventar, nos iremos todos juntos de aquí.

—Jake... —mi cuerpo reacciono cuando Alexa me hablo.

La mire quedándome unos segundos pasmados como un imbécil. Hay sangre en ella, mucha sangre. Se sostiene el abdomen y se desvanece cada que quiere respirar.

La sostuve antes de cayera, poniéndome en el suelo con ella y quitándome el saco para ponérselo en la herida. ¿Como putas no me di cuenta de esto? ¿Como carajos no escuche? Nunca sonó un disparo proveniente de atrás.

Hijos de perra tuvo que haber sido alguna pistola silenciada.

—Jake, me duele. —susurro.

—Todo estará bien. Estoy aquí. Te tengo. Solo aguanta, nena —dije —Mierda no. Alexa no hagas esto, no ahora. Maldita sea, no me hagas esto, no me dejes, no así.

Siento que el mundo se me está cayendo encima, verla así me está matando. No me puedo quebrar, pero ver como pierde su color me pone nervioso, me hace temblar, no quiero que se vaya.

No, ella no se va a ir así de fácil. Mi chica es muy fuerte, ella puede con esto y más.

—Alexa, mi niña. —Martha quiso acerarse, pero se detuvo cuando se echó a llorar.

Veo como Alexa quiere cerrar sus ojos. Quiere dormirse.

No voy a permitir eso, no puedo verla así.

—Alexa, no te duermas. —le dije.

—Me duele. No puedo respirar.

—Ya estoy llamando la ambulancia. —dijo Marlon.

—Jódanse todos con su ambulancia. —dije, molesto. Yo mismo la quería llevar al hospital más cercano.

—Jake... —me llamo Alexa.

—No me has esto —susurre —. Recuérdamelo.

—No puedo respirar.

—Recuérdamelo, maldita sea. —exijo, viéndola cerrar sus ojos.

Quiero que me recuerde que es mía.

Quiero que me recuerde que me pertenece.

Quiero que me recuerde que nos pertenecemos.

—También me gustas. —susurro.

Mi corazón palpita desesperado cuando escuche sus palabras.

Puedo sentir la mirada de todos encima de mí.

Los gritos han cesado, ya no hay nadie en la iglesia, solo ambas familias.

Puedo escuchar a los hermanos Fabray gritando a lo lejos la dirección del lugar.

A Martha llorando desconsoladamente en el hombro de su esposo, mientras él le dice algo escondiendo su cara en su cuello. Evita que lo vean llorar.

—Jake...

—Cállate. —le dije a Marlon.

—Ella ya esta...

—No digas nada...