Regalo Del Océano {JJP]

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Ahora solo le quedaba 4 noches. 

No sabían qué bestia vendría en la noche para intentar matar a JinYoung, así que los dos estaban esperando atentos, esperando. 

Park estaba sentado en las escaleras, leyendo uno de sus libros, mientras que JaeBum estaba en el timón. De pronto, uno de los tripulantes dio un fuerte grito, asustando a todos.

JinYoung corrió rápido hacia esa persona, mirándolo muy pálido y shockeado. 

— serpiente, serpiente... — repetía el hombre herido. 

— JinYoung, no te muevas. — le ordenó Im, haciéndolo quedar congelado. — JinYoung, con cuidado, hazle un torniquete, pero no te muevas.

Se dio cuenta de lo que sucedía. Volteó, mirando varias serpientes con la cabeza en alto, negra con amarillo. Se asustó, sin embargo debía atender al hombre. 

— tú eres el culpable. — le dijo ese hombre envenado. — tu maldición me está matando. 

JaeBum tomó una antorcha, acercándose a las serpientes, cosa que las asustó y empezaron a retroceder. JinYoung ignoró las crudas palabras del ese pirata y empezó a darle atención médica, aunque sabía que necesitaba otras cosas para ayudarlo. Buscó donde tenía la mordedura, aunque no encontraba a nada. 

El hombre tomó a JinYoung del cuello, estampándolo contra el sueño y dejando su cuerpo sentido, con el aire abandonando sus pulmones, luego los golpes no se hicieron esperar, como si fuese un demonio. Bastante mal ya, miró cómo el hombre estaba sobre su cuerpo y alzando una cuchillo para ser enterrado en su pecho. 

Im no dudó en darle un tiro entre los ojos, tomando a JinYoung bastante mal herido. Ya no era cansancio o un salto en el agua, su cuerpo estaba mal, como si fuese otro ataque de Jackson.

Y eso era. 

Aquel que había matado ya no estaba, dando a entender que solo era otro ataque de Jackson, uno que cruzó todos los límites.

— JinYoung, Jinnie... — lo tomó entre sus brazos y llevarlo a su cuarto, abriendo su ropa para encontrar su pecho con un enorme hematoma, un derrame interno. 

Entre lágrimas y desesperación, tomó un cuchillo y lo enterró en su pecho, solo un poco para dejar que la sangre no colapsara sus pulmones. Estaba inconsciente, con sangre saliendo de su boca y su nariz, así que alzó su rostro, dejando que toda esa sangre que no ha coagulado. 

Si perdía a JinYoung antes de llegar con Jackson, mataría al desgraciado, a él y cualquier persona que se interpusiera en su camino.

Mark llegó y lo apartó lentamente.

— tendremos que hacer algo para llegar rápido hacia la isla, si eso sucedió hoy, no quiero imaginarme lo que hará mañana. — le dijo el rubio. — todas las velas, todos trabajando y nos apresuramos a llegar.

La mirada oscura de Im le dijo todo. 

Ver a JinYoung de esa forma, con la vida escapándose lentamente de su cuerpo. No quería verlo así nunca más, ni hoy, ni mañana. Por lo que tomó una chaqueta y la cerró, saliendo del cuarto para dar las órdenes.

— si para el amanecer no estamos en la isla, los haré trabajar hasta que sus músculos se separen de sus huesos. — ordenó. — pónganse a trabajar.

Dicho y hecho. 

Todos fueron a sus puestos. Desplegaron todas las velas y algunos se pusieron a remar, intentar avanzar todo lo que se pueda antes de que algo más los atacasen. No entendían cómo es que su capitán hacía de todo por un niño rico, que después de todo, estaba condenado a morir, él había traído la desgracia a ese barco, y por primera vez en muchas noches no pelearon contra un animal o monstruos marinos, sino que el ataque había sido directo a él.

El que JaeBum hiciera todo por él los dejaban descolocados, enojados más que nada. 

Pero al capitán no le interesaba, así que, dada la orden, volvió a su cuarto para mirar el estado del menor. Tomó su mano, sintiendo su pulso débil.

— luchaste contra monstruos y una tribu de caníbales, no puedes dejar que esto te venza ahora. — le dijo Im. — eres lo único que te he amado en mi vida, no puedes irte así...

Mark miró a su capitán inconsolable, destrozado ante su miedo al ver a JinYoung morir. Realmente él se enamoró de ese chico, realmente quería al menor, ahora que lo miraba así, ahora que lo apreciaba vulnerable, entendía el profundo dolor que sentía.

Salió del cuarto, dejándolos a solas.

— no debemos hacer esto por él. — alegó YuGyeom. — JinYoung nos trajo su maldición, él estaba condenado a morir, nosotros no. — detrás de él se escucharon los alegatos de los hombres, dándole la razón a Kim. — no vamos a matarnos por alguien que está condenado a morir.

Tuan frunció el ceño, enojado con todos, especialmente con YuGyeom. JinYoung solo era odiado por su premisa de ser un niño rico, sin embargo se justificaban con una maldición que no era su culpa.

— todos ustedes estaban condenados a morir. — exclamó Mark, callando a todos. — en especial tú, mocoso de mierda, sino fuera por la piedad de JaeBum tu cabeza estaría picada en una estaca. Él se enamoró de ese niño rico, un niño que ha hecho más que todos ustedes en toda su vida y pese a sus idioteces, no les ha hecho nada. JinYoung estaba maldito por culpa de Jackson, y si no fuera por JaeBum, ustedes también estarían malditos por ese idiota. La única persona que ha hecho algo más por Im ahora está muriendo y solo necesita que este barco llegue a tiempo a la isla, la única persona que ha hecho a JaeBum feliz está muriendo. Por primera vez, JaeBum siente algo por alguien y está sufiendo, así que está haciendo todo lo posible por él porque lo ama, y tú, mocoso de mierda ingrato y mal agradecido, estás haciendo una pataleta por no querer ayudar a la única persona que ha movido el culo para hacerte el favor de tu vida. Si no quieren hacerlo por JinYoung, entonces háganlo por JaeBum. Yo lo haré por JinYoung, porque él ha querido hacer algo por mí, y porque es un chico dulce que no le ha hecho daño a nadie. Ay, estos piratas apestosos, qué rabia me dan estos idiotas ingratos. — comentó en voz alta, sin arrepentirse. — muevan el culo ahora o enveneno el ron.

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Si no tienes un amigo como Mark, entonces no tienes amigos.