UNA MALDITA HISTORIA DE AMOR

CAPÍTULO .25.

El resto de la tarde, la comida, el paseo al acuario junto a su padre y amigos, completó la felicidad de Saint, lo había sentido como una celebración en honor a su boda, que al final del día se sentía plenamente feliz, pero quien iba a pensar que tan solo al poner un pie dentro de la casa, su felicidad se convertiría en nada.

- ¿quieren ver una película? - Kirán habló cerrando la puerta, aunque vio que ya no contaban con suficiente tiempo para una, en menos de veinte minutos, Burat estaría ahí.

- estoy cansado ¿podemos verla mañana? - dijo Saint tirándose al sofá. - quiero dormir. - agregó.

- yo... iré a terminar la tarea. - dijo Zee, ya que Ohm le había dado los apuntes de las clases perdidas.

- bien. - Kirán tomó asiento. - si no quieren ver una película, entonces hablemos... siéntate. - le dijo a Zee.

Al ver la seriedad con la que su padre hablaba, Saint se sentó adecuadamente, dándole espacio a Zee. Kirán permaneció en silencio, tratando de buscar las palabras adecuadas, entre suspiros y suspiros, no las hallaba.

- sé que he sido un padre ausente, sé que no les he dado la atención que merecen, sé que la culpa aquí la tengo yo y no ustedes... - Kirán dejó de hablar, el nudo en su garganta no le permitía dejar salir las palabras.

- si tan solo hubiese sabido ser un padre, si tan solo su madre estuviese aquí... no sé qué hacer sin Sarai. - Kirán se sentía perdido desde que su esposa murió, pero ahora no encontraba una salida, una solución...

- papá, has sido un buen padre, eres el mejor del mundo. - Zee habló cuando su padre permaneció en silencio.

- ¿entonces tú lo manipulaste? - habló Kirán.

- ¿papá, de qué hablas? - Zee estaba confundido, a pesar de que en toda la tarde su padre había estado tan extraño.

- sé que ustedes mantienes una relación... incestuosa. - Kirán habló, dejando a sus hijos atónitos, como si hubiesen visto al mismísimo demonio.

- ja, ja, papá, ¿de dónde sacas eso? - dijo Zee con una risa nerviosa.

- no me trates de mentir, teniendo en contra un video y... - Kirán paró, recordar era como una puñalada para él, le dolía tanto ese recuerdo.

Al escuchar la palabra 'video' Zee pensó en Bow, al parecer había cumplido su amenaza, ahora solo quedaba negar todo.

- ¿vas a creerle a un extraño que a tus propios hijos? - dijo Zee. Saint permanecía en silencio, sentado, muerto de miedo.

- no creo en las palabras de un extraño... -

- ¿entonces? - Zee interrumpió.

- creo en lo que vi y no hablo del video, hablo de que mis hijos perdieron la cabeza al besarse en la entrada de su propia casa, no importándoles si su estúpido padre entrara por la puerta... eso fue lo que vi. - Kiran hablaba mostrando tranquilidad, aunque por dentro era todo un desastre, teniendo un triste carnaval de emociones.

- papá, tu, tu... - Zee titubeó.

- ¿nos viste? - habló Saint y su padre asintió, resolviendo todas sus dudas. Al verlo Saint quiso correr y esconderse bajo las sábanas, su corazón chillaba y temblaba de miedo, no podía ni imaginas lo que les deparaba el futuro.

- no sé qué hacer sin el consejo de su madre, por más que pida a gritos una respuesta al cielo, no la encuentro... haré lo mejor para ustedes. - Kirán habló. Saint rápidamente se puso de pie y caminó hacia su padre, poniéndose de rodillas y sosteniendo las manos de su padre, habló: