Nirvana (Serendipia II)

v e i n t i s e i s

Cuando llegamos a casa llamo a Nate para preguntarle si le ha dicho algo a Ryan.

–No le he dicho nada, tranquilízate–

–Vale, perdón es que está un poco sensible últimamente y no quiero crearle más inseguridades–

–Tranquila, no le voy a decir nada–

–Vale, gracias–

–Por cierto, ¿Qué tal con Kate?–

–Bien, hemos hablado bastante desde que nos vimos–

–¿Y tenéis planes?–

–Todavía no, noto un poco de rechazo por su parte, pero pienso mudarme a California el año que viene–

–Nate, no te ilusiones tanto con Kate– Le advierto.

–Lo sé, es que yo...– Escucho una puerta abrirse.

–¿Es mi hermana?– Dice Ethan.

–Si– Dice Nate.

–Hola medio metro—

—Hola mini Browning, ¿Que haces en Dartmouth?—

—De visita a ver a Nate—

—Me alegro—

—Oye, a ver si me llamas de vez en cuando— Dice Ethan.

—Lo haré, no te preocupes—

—¿Qué tal lo lleva Ryan?—

—Lo está intentando, pero obviamente es duro para él—

—Iremos a veros dentro de poco—

—Sí, eso espero—

Ambos se ríen.

—Pásame a Nate—

—Adiós, te quiero—

—Yo a ti no—

—Te echa mucho de menos— Dice Nate.

—Lo sé, yo a él también— Sonrío.

—Bueno, en otro momento seguiremos hablando de lo de...—

—Shh— Dice antes de que termine.

—Adiós— Me río.

Cuelgo y bajo al salón.

—¿Que hay de comer?— Le digo a mi madre.

—Coliflor, te la he dejado en el microondas—

—Mamá llevamos toda la semana comiendo lo mismo...—

—Deja de quejarte, es muy sana—

Como ensayo por las tardes ya no me siento a comer con mi familia, siempre tengo que recalentar la comida.

Me siento en el sofá junto a Ryan y mi madre.

Es raro verla aquí a estas horas, desde que la descendieron pasa más tiempo en casa.

Llaman a la puerta  y Ryan se levanta para abrir.

—Mamá, ¿que haces aquí otra vez?— Dice mirando a Martha.

—Ya te lo he dicho, están liadas—

—¿Te digo yo que estás liada con Amanda?— Dice mi madre pellizcándome el brazo.

—¡Au!—

—Con Amanda no, pero con Beth sí— Dice Martha sentándose al lado de mi madre.