PRÓLOGO

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Para los que lloran en silencio y fingen una sonrisa, para los que ahogan sus gritos y para los que intentan salvarse hundiendo el dolor en sí mismos.

Para ti, para ti que luchas por seguir adelante y afrontas los miedos porque eres el único que puedes ponerte límites.

Hay un dicho que dice, ¿te quieres morir? Pues lánzate a un lago, no respires y verás como luchas por salir, tal vez no queremos matarnos, si no matar algo dentro de nosotros. Aunque bueno yo pienso que en realidad es un instinto humano de supervivencia, por eso actuamos de inmediato ante una situación de peligro, en especial, si es la muerte.

La muerte... un término demasiado doloroso para algunos y para otros todo lo contrario. Nadie sabe lo que es, nadie sabe lo que se siente, ¿qué habrá detrás de todo esto? ¿Nada? ¿Otra vida? ¿La reencarnación? ¿Existirá el cielo? ¿El infierno? Demasiadas preguntas sin respuesta, ¿verdad? Nunca lo sabremos. Aunque yo tengo mi propia teoría y creo que la muerte es sentir lo mismo antes que nacer, exacto, nada.


Pero... ¿y si en verdad no es así? Y que exista otra vida o la reencarnación, el cielo o el infierno, cosas que nos meten en la cabeza desde pequeños y que nos creemos que es verdad, porque si te paras a pensar es imposible que exista algo así, el cielo lo idealizan como algo increíble y maravilloso donde estés completamente seguro y feliz después de la muerte, y, ¿el infierno? Es lo peor, ¿no? Pero... ¿y la reencarnación? Bueno, sólo son creencias.

Cuando estás al borde del precipicio, entre saltar al vacío o no, es cuando te das cuenta de muchas cosas... Qué hubiera pasado si le hubiera abrazado por última vez, si le hubiera besado, si le hubiera dicho un "te quiero" un "adiós", si hubiera estudiado para ese examen, si hubiera ido a esa fiesta, si no me hubiera quedado en casa, si hubiera salido, si me hubiera tirado a la piscina, si me hubiera adentrado más al mar, si no le tuviera miedo a las alturas... pero muero de ganas por saltar, de saber como se siente por un segundo caerse, ver la vida pasar por delante de mis ojos y luego... nada. Otra parte de mi dice que no salte, que me quede aquí en esta vida, que ría, que baile, que grite, que disfrute, que viva...

SilencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora