Capítulo 20

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Maya

Observo a Nis pasearse por toda mi habitación, se para justo frente de una lista, la lista. Está colgada en la pared, como si algún día pudiera cumplirla.

—La escribí a los dieciséis, justo antes de internar —sonrío ante el recuerdo —. Son cosas que quiero cumplir antes de morir, como puedes ver todas están tachadas, menos una. Ser enfermera.

—¿Cumpliste todas esas? —Se gira para mirarme.

—Sí y espero cumplir la última.

—Sé que lo conseguirás —me sonríe.

—Quiero darte algo —busco en el cajón de la mesilla de noche.

Saco el collar y lo guardo en mi mano, nos sentamos en la cama en forma de indio, frente a frente. Extiendo mi mano abriendo el puño, dejando ver la media luna dorada.

—Nuestro collar —susurra —. Pensaba que lo había perdido, me lo quitaron en el psiquiátrico cuando tuve un ataque —sus ojos brillan de emoción.

Lo sujeta entre sus dedos y se lo coloca alrededor del cuello, luego de eso me abraza con fuerza, sonrío ante su acto y la envuelvo mis brazos.

—He quedado con Marco —digo luego de separarnos.

—¿Marco? ¿El amigo de Ales? —Pregunta.

—Sí, ese —sonrío de boca cerrada —. Sabe algo de mi pasado y quiero averiguarlo, quiero saber la verdad de todo.

—¿Crees que te lo dirá?

—Eso espero —suspiro.

—¿Te gusta?

—¿Qué? No —niego rápidamente.

—¿Segura? Te has puesto roja.

Le lanzo un cojín que estaba a mi lado pero ella lo atrapa y me lo devuelve.

Sus ojos se achican cuando se ríe y nuestras risas se mezclan en el silencio de la habitación.

—Te he echado tanto de menos Maya —sonríe mientras niega con la cabeza.

—Yo también Nis, yo también —doy una sonrisa triste.

SilencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora