Capítulo 14. He hoʻomanaʻo aneiʻoe?

618 31 5
                                    

El que Diane despertara suponía que alegraría a todos. Por su parte, Sam esperaba volver a ver su prometida, Dan a quien es como su hija, Danny a quien es una de sus mejores amigas, y Steve al menos poder disculparse con ella frente a frente y si tenía que continuar su camino sin ella, lo haría. Pero al menos ella estaría viva.

Pero nada de esto pasó; Diane no podía recordar más de los sucesos acontecidos una semana antes de la muerte de Greg y Joey, según su mente, ella ya tenía todo listo para atrapar a Valdés, pero no entendía, cómo había terminado en Hawaii si su investigación dejo de centrarse en ese lugar una vez que supo que Valdés solo mantenía ciertos negocios con los Yakuza, era todo.

Su mente intentaba recordar algo cada vez que despertaba pero no lo conseguía, en cambio anhelaba muchísimo ver pasar por la puerta a Alex, o a cualquiera de su equipo. Empezaba a temer que algo había salido mal y no querían decirle aún, pero aquel pensamiento era poco probable pues sus planes aún solo estaban en conversación con el Gobernador de Los Ángeles.

Por lo que ni Steve podría disculparse, ni Danny podía tener a su amiga, ni Sam podía volver con su prometida. Aquello había devastado su corazón, no podía creer que Diane tuviera que pasar por todo eso, y mucho menos tener que volver a pasar por heridas que ya habían cerrado.

Sam sabía que cuando le dijesen que Greg, Joey y Alex estaban muertos ella quería deshecha, pues su equipo era su familia.

Entre tanto, era la segunda mañana desde que Diane había despertado, su equipo médico había organizado una junta para establecer cuál era el estado de Diane y como iba a manejarse; en aquella reunión estarían David y un neurólogo junto a un psiquiatra especialista y los familiares de Diane; Sam por supuesto y Dan... Danny había oído sobre esto pero el solo apareció sin decir nada, sabía que pedir estar en esa reunión era una negativa rotunda, así que al querer saber sobre el estado de su amiga llegó antes a la reunión y solo tomo asiento, ya después habría tiempo para explicaciones.

...

Mientras todos estaban ocupados en aquella reunión, Steve aprovecho para escabullirse y ver a Diane; Sam y Dan estaban renuentes a que esté se acercará a ella, así que aprovecho que nadie de su equipo médico estarían y fue a ver a Diane.

Al entrar ella estaba dormida, y por alguna razón aquella imagen le removía todo, no quería verla de esa manera. Mientras caminaba por la habitación notó que está estaba llena de flores, se preguntaba quienes las habían enviado si Diane solía ser tan reservada para hacer amigos. Pero entre ellas había una tarjeta que decía "Hermanos Dobuois".

Decidió dejar lo de las flores y tomar asiento justo a su lado. Diane enseguida sintió su presencia y abrió sus ojos y comenzó a intentar levantarse.

—Oye, tranquila. Yo te ayudo –dijo Steve levantándose inmediatamente de su silla.

—Gracias –musito ella.

—Por nada –dijo Steve terminando de acomodar su almohada–, ¿Cómo te sientes?

—Confundida –respondió ella–, y ahora que te veo más. ¿Te conozco? O bueno... De hecho si, estabas ayer con el hombre rubio que se sorprendió cuando le dije que no sabía quién era.

—Sí, ese soy yo –y Steve sonrió un tanto melancólico–. Bien, supongo que haremos esto de nuevo, mi nombre es Steve McGarrett –y extiende su mano hacia ella y Diane sonríe un poco extrañada pero igual la toma.

—Diane Brighton –dice ella–, ¿A que debo su visita señor McGarrett?

—Bueno... Explicártelo es un poco difícil, pero puedo decirte que me alegra mucho verte al menos así.

Hawaii Five-0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora