Capítulo 19. Aloha hou Hawaii

558 30 13
                                    

Diane

"Vamos Diane. Respira. Ya hemos hecho esto antes y en peores condiciones". Sabía que tantas heridas me harían colapsar pronto, de hecho ya podía sentir mi cuerpo demasiado cansado. Pero no podía rendirme y acabar enterrada en algún sendero de esta isla. Debía seguir.

Mientras le daba fuerzas a mi yo interno pude oír unos pasos, así que tome más fuerte el delgado pero pesado que tenía en la mano, y con la fuerza que me quedaba y hasta donde estos zapatos me dejaran me dispuse a levantarme lentamente y aun recostada al árbol donde estaba. Los pasos cada vez se oían mas cerca así que cuando mi cuenta mental termino en tres, salí dispuesta a golpear al imbécil que me seguía.

Al salir este me apuntaba con un arma, se sorprendió al verme pero su cara demostraba una especie de alivio, sin poderlo evitar, mi cuerpo comenzaba a colapsar, y caí estrepitosamente al suelo, soltando el delgado tronco y deteniendo un poco mi caída con las manos.

— ¡Ey, tranquila! Ya estoy aquí, te sacare de aquí ¿De acuerdo?

—M...McGarrett —logre decir, estaba demasiado mareada y ya mi cabeza parecía no coordinar mucho lo que decía—, ¿Cómo sabias que...Que estaba en la isla?

12 horas antes...

New York Police Department, Manhattan. New York.

Hora: 03:46 am

Mac estaba en urgencias, y yo... Yo iba camino a encontrarme con Hart, no podía huir para siempre y Mac no podía esconderme tampoco para siempre, así que le prometí que iría con Hart y llamaría a mis abogados para que me ayudaran con esto, y que si debía irme, le prometí que estaría bien. Además de agradecerle por haberme devuelto la razón para querer ser la Comandante Diane Brighton.

—Me alegra que lo haya pensado mejor que su jefe Diane —dijo Hart al verme llegar.

—No le conozco, no me tutee por favor —pedí y este solo rodo sus ojos—, ¿Por qué se supone que debo ir con usted? ¿Por qué la orden de arresto?

—Ya me habían comentado de su amnesia post traumática, una pena —dijo este y se levantó de su silla para merodear por la que era mi oficina—, sin embargo, eso no la exenta de todo lo que hizo en Hawaii.

Y Don que había decido acompañarme le miro de mala manera.

—Hace unos meses llego a mí una sentencia de la corte donde se me excluía de la vinculación de Wo Fat y Frank Delano, así que no entiendo —replique.

—Eso es solo una pequeña parte, me sorprende que sepa de ello, ¿y su amnesia?

—Tengo amnesia, no algún problema psicomotor. Se de alguna de las cosas que hice en Hawaii, las investigue cuando llegó esa sentencia.

—Bien, como le dije, eso es solo una parte ¿Acaso recuerda que usted planeo el asalto a una embajada de Rusia en Hawaii? ¿O que fue a Corea del Norte sin autorización para rescatar al comandante McGarrett, usando medio y civiles en el proceso? —y eso ultimo me dejo pensando.

Entonces aquel sueño no era parte de alguna película un poco loca de mi cabeza, realmente había ido a salvar a Steve McGarrett, ahora sé que fue a Corea, lo que no se es el "porque".

—Pues no, lo recuerdo. Sabe que, si tiene algo que decir o esa orden, hable con mis abogados —me levante e iba a irme pero este me detuvo.

—Comandante ¿no? ¿Así me pidió la primera vez que la llamara?... Ok, no haga esto más difícil. Porque lo próximo será que venga el FBI y entonces usted no tendrá salida, y no volverá a tocar un arma en su vida, ni siquiera podría repartir multas. Así que le agradezco que venga conmigo.

Hawaii Five-0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora