Princesa

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-Ana: Tranquila yo tengo guardada mi ropa de adolescente para cuando mi hija sea mayor.

Me dio la ropa y me la puse en el baño. Al salir nos pusimos a cenar y yo dormí en el sofá-cama.

A la mañana siguiente me desperté por un dulce olor que provenía de la cocina. Me levanté y fui allí.

-Ana: Sientate cielo que vamos a desayunar.

-María: No gracias si yo ya me voy.

-Ana: Sientate si no eres molestia.

Me senté y desayunemos, en mitad del desayuno Ana se levantó y fue a su habitación.

-Ana: Mira María, esto es para ti. Te lo regalo, se que te veras preciosa con el.

-María: Ana pero si es para tu hija.

-Ana: Ya tendrá mi hija ropa cuando crezca, aun es muy pequeña.

-Miguel: Anda ve y pontelo.

Fui al baño y me puse el conjunto que me regaló Ana. *foto multimedia*.

Salí y les enseñé como me estaba.

-Miguel: Estas preciosa

-Ana: Pareces una princesa

-María: Graciaas, bueno he de irme ya. Gracias por todo.

-Ana: De nada, aqui nos tienes para lo que necesites.

Me despedí de ellos, cogí mis cosas y me fui. Ya en la calle pensé de a donde podría ir, asi que fui a la casa de Rubius y Mangel. El portero me abrió con una amplia sonrisa, le saludé y subí en ascensor. Toqué al timbre y me abrió Mangel. Le abracé y me invitó a pasar. Yo creía que iba a estar sola con ellos pero no, allí estaban los gemelos y Noelia.

-María: Bueno yo ya me voy, adiós.

-Rubius: Quieta ahí.

-María: Oye que no soy una mosca cuando tu vas a intentar matarla, soy una persona.

-Rubius: jajaja, sientate aquí.

-María: Vale.

Me senté al lado de Rubius y Mangel al lado mío.

-Rubius: Creo que le debeis una disculpa a ella.

En ese instante me empecé marear un poco asi que apoyé mi cabeza en el hombro de Mangel y cerré los ojos.

-Rubius: María, ¿estas bien?

-María: Sí

-Jesús: María siento lo que te hice, es que como vi que estabas sola pues quería que te unieras. No pretendía molestarte ni que te fueras así.

-Noelia: Te estuvimos buscando pero no te encontrabamos.

-Dani: ¿Nos perdonas?

-María: Sí.

Me abrazaron pero yo seguía con los ojos cerrados. Salimos a la calle para dar una vuelta (ya tenía los ojos abiertos) y nos encontremos a las fans del otro día pero no hicimos caso.

*Narra Dani*

Ayer por culpa de una broma por poco perdemos a nuestra princesa pero al menos ya nos ha disculpado. Salimos de la casa de Rubius para dar una vuelta. Notaba a María extraña, parecía que le pasaba algo.

-Dani: María, ¿estas bien?

-María: Sí, tranquilo.

Pasé mi brazo por sus hombros y de repente....

Tan solo tú, mi vida entera...(GEMELIERS){Sin Editar}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora