Impregnación.

Tras sábanas de terciopelo, pude volver a ver tu rostro. 21/45

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De enemigo a Compañero de Batalla.

—Se ha hecho una promesa, y el emperador en nombre del amor, ha decidido a travesar el portal.

El espectáculo era impresionante, Jeket tenía mucho tiempo que no salía de su reino, y al hacerlo esta vez podía darse cuenta del mundo que existía y que aguardaba para él también. — Desde lo alto, mientras montaba a su dragón, recordaba los acontecimientos inesperados y desafortunados que se dieron en su vida, obligándolo a refugiarse en la dimensión del Portal de Anubis, donde todo tiene un precio. Nadie entra, nadie sale.

   Por neblina oscura y el denso humo, no se podía ver a los enemigos con mayor claridad, pero dejándose llevar por el olor del humo, intuían y hacían frente a su oponente.

Las flechas se disparan sin cesar, buscando cualquier blanco para atacar. Algunas silbaban por encima de los parapetos y caían sobre las piedras restallando y chisporroteando, al no tener un blanco en la mira, solo caían.

Había comenzado el ataque a los "Recodos de las Nubes". Las tropas del reino de las constelaciones, a cargo del emperador "Mei Hing", empezaron atacar y la brillantez de una noche clara de luna, se convirtió en un manto negro de oscuridad y de miedos latentes.

La tormenta había empezado a caer, los relámpagos trillaron con un fuerte sonido al caer al piso, que desgarraban las tinieblas formadas por el humo ante el acrecentado fuego, que se disparan de las puntas de algunas flechas, cuya puntas lanzaban fuegos.

.- De pronto, los arcos rompieron en gritos agudos, agitando las lanzas y espadas ante la presencia de dragones, cuya boca empezó a arrojar fuego desde alto cielo. Todos bajo las órdenes del emperador, empezaron a disparar una nube de flechas contra todo aquello que esta en el cielo y se moviese.

El parapeto que estaba sobre Gusu, fue levantado, ante la presencia de Si Zhui, que dejo a todos asombrados al ver que era él, quien dominaba a la bestia.— Como el señor de la Luz, su figura juvenil se asemejaba, volando por el alto del cielo en plena noche sobre el lomo del dragón. — y solo se podía ver el brillo de aquel enorme animal, que aleteaba al daba vueltas sobre la gran montaña y colina que rodeaba a la secta.

.- En los grandes campos se libra una batalla cuerpo a cuerpo, las espigas de los trigales se cubrían por la ferocidad de los mayores, los más jóvenes, trataban de agruparse de tres para no ser una fuerza débil, e ir tras el enemigo y dar la batalla.

Lan XiChen se encuentra librando una contienda cuerpo a cuerpo, con un hombre de mascara negra, y grandes músculos. Lleva un vendaval de guerra, y cada espiga que lanzaba con su flecha era una púa erizada y centelleante.

Los enemigos se abalanzaron sobre los nuevos refuerzos, los dragones eructaban con toda su fuerza grandes llamaradas de fuego para alejarlos, era una marejada violenta, unos contra el muro, otros debajo de ellos, algunos sobre las colinas altas, otros debajo rodando por las cascadas, donde el agua cristalina se vestía con el velo de la sangre roja oscura, mancillado la pureza de sus aguas.

De pronto una rampa se oyó bajar, Lan Zhan se hizo presente, desde lo alto cayendo con fuerza, y ante la presencia de todos, se convierte en el objetivo principal de Mei Hing.

..¡Quiero su cabeza, tráiganla!.

Se oyó el grito de guerra al recibir la orden, Lan Zhan ahora es el punto de ataque.