One Shots | Caché |

Capítulo 51: ¿No Son Nada? - Parte 2 -

¿Nos puedes decir que te pasa? — pregunto Sebas mirando a Calle quien caminaba de un lado a otro en la sala de su casa —

Johann y Pau también estaban en el lugar pero no se atrevían a interrumpir la caminata de la castaña.

Todo esta mal...pero, en ese momento no le vi así... — murmuraba Calle sin parar de caminar — por suerte lo detuvimos...pero ¿por que me arrepiento de haber hecho eso?

¡Daniela! — grito Sebas logrando que Calle frenara sus pasos y lo mirara — ¿que te pasa?... ¿Acaso sabes por qué Poché lleva cancelado nuestras citas semanales por tres semanas?

Los ojos de Calle se llenaron de la lágrimas al instante, era su culpa que Poché estuviera cancelando todo tipo de salidas donde ella estuviera involucrada.

¿Dani? — la castaña paso sus manos por sus ojos sacando las lágrimas —

Bese a Poché — admitió en voz baja sintiendo una presión en el pecho —

Eso no es tan malo — dijo Johann mostrando una sonrisa tranquila —

Pau noto el conflicto interno que se reflejaba en la mirada de la castaña y supo que había algo mas.

¿Paso otra cosa?  — pregunto Pau con cautela —

Calle se acerco a uno de los sofás individuales y se sentó suspirando, el sentimiento de culpa y tristeza no se iban y cada vez que recordaba aquélla noche la confusión y las ganas de llorar la abarcaban.

Flash Back

Ambas chicas compartían gustosas un par de tragos en el bar "La Quinta Estación". Decidieron celebrar sus diez años de amistad.

¿Te parece si vamos a mi casa? — preguntó Calle arrastrando las palabras gracias al alcohol —

Te iba a preguntar lo mismo — concordó Poché sonriendo —

(...)

Entre risas y abrazos cariñosos ambas chicas entraron a la casa de la castaña.

¿Puedo dormir contigo? — pregunto Poché abrazando a Calle por la espalda —

¿Cuando no lo has hecho? — cuestiono Calle girándose entre los brazos de la mas baja quien ajusto mas el abrazo —

La tensión empezó a formarse en el lugar, los corazones de ambas chicas latían desenfrenados gracias a la cercanía, sus ojos delataban no solo el deseó también el amor que se tenían.

Sin previo aviso los labios de la castaña atraparon los de Poché en un beso profundo cargado de deseó.

Las manos de Poché fueron a parar en el cabello de Calle enmarañado lo un poco, la mas alta sujeto con firmeza la cintura de Poché caminado un poco hasta acorralarla contra la puerta tornando así el beso mas apasionado.

Poché rompió el beso para mirar a Calle a los ojos, ambas jadeaban gracias a la falta de oxígeno que causo aquel beso.