One Shots | Caché |

Capitulo 95: No Todo Fue Un Show - Parte 3 -

Poche se encontraba nerviosa. Claro, ¿quien no lo estaría cuando estas a punto de reencontrarte con la persona que amas pero a la que le has hecho tanto daño?
Sebas le había dicho que le esperara en el auditorio de la universidad, él llegaría con Calle. Su mente trabajaba de forma rápida, pensando que sería lo que diría. Cuando la puerta del auditorio se abrió se escondió detras del telón en el escenario, pasos se escucharon en el lugar. Con cada uno de esos pasos el corazón de María José se aceleraba.

Hasta aquí, te dejo. Suerte — escuchó la voz de Sebas, luego se volvió a escuchar la puerta del lugar abrirse y cerrarse —

Calle veía el lugar con nostalgia. Poche salio de su escondite encontrándose con la castaña, quien al verla frunció el ceño.

Calle... — susurro la mas baja con una pequeña sonrisa. —tanto tiempo.

Debí imaginarlo — Poche borro su sonrisa y la miro sin entender —, cuando Sebas dijo que alguien queria verme, debí suponer que eras tú esa persona. ¿Que quieres?

Explicarte todo — Daniela solo la miraba fijamente —. De verdad que...no quería terminar asi contigo.

¿Y como querías terminar? — pregunto Calle tratando de que su voz no se quebrara — ¿tu y yo felices pretendiendo que no me estabas ocultando tal cosa?

No, te lo juro. Yo pretendía contarte todo — le aseguro —, decirte la verdad.

Contéstame algo...y por favor se honesta — pidió la castaña mirandola a los ojos —

Lo quieras preguntar... Ya no quiero mentirte Calle — dijo mientras asentía —

¿Alguna vez algo de lo que me dijiste fue real? — inquirió con voz calmada, aunque por dentro estaba hecha un manojo de nervios —

Desde nuestro primer beso...desde ese momento, todo fue real — admitió bajando la mirada, sus ojos se estaban empañando y no quería que Calle la viera llorar — perdóname Calle...solo te pido eso...se que te hice sentir mal, te hice daño, jugué con tus sentimientos — con el dorso de su mano limpió las lágrimas, que sin permiso, habían salido y ahora corrian por sus mejillas — soy la peor persona, se...se que no merezco tú perdon...pero, no puedo vivir sabiendo que me odias. Te amo, me enamore de ti, no lo pude evitar y al saberlo, me aleje de Erika, iniciar contigo de verdad...sabía que te tenía que contarte todo...lo iba a hacer, sabía que tal vez tú te irías, pero tenía que ser honesta contigo. Y cuando te enteraste, yo entre en pánico, Erika planeó todo para que te enterarás de esa forma. Se que nada de esto tiene sentido, pero solo quiero que me perdones.

Calle se acercó a la contraria para sujetarla por las mejillas y hacer que la mirara. Sabía que estaba siendo honesta. Los veía en sus ojos. Las lágrimas aun corrían por las mejillas de Poche de forma descontrolada, pero hacía todo lo posible por no llorar de forma escandalosa.

Te perdono...pero no me pidas que vuelva contigo. — él corazón de Poche se rompió mas ante las palabras de la castaña. Un sollozo escapó de su garganta — te mentiría si te dijera que no sigo dolida por lo que me hiciste.

Calle... — quiso añadir pero la castaña nego con la cabeza —

Te amo...de eso no tengo dudas — Calle apoyo su frente contra la de Poche, mientras esta solo cerraba los ojos disfrutando de la cercanía de la otra — pero, no podemos volver, no ahora.

Poche lo sabía, y por mas que le costará aceptarlo, ya no había marcha atrás. En esta ocasión la esperanza y la paciencia debían ser sus mejores aliados.

¿Te puedo pedir algo? — pregunto Poche abriendo los ojos con cierto temor —

Claro... — acepto Calle mirandola a los ojos aun sin separarse —

Poche rodeo la cintura de la castaña con sus brazos y la apretó contra ella.

¿Me regalas un último beso? — pidió con las voz temblorosa — solo te pido eso...no te volvere a molestar hasta que estés lista para tratar de retomar todo...por favor.

La mirada de Calle bajo a los labios de la contraria antes de acercarse para que estos rozaran con los suyos. Un suspiro abandono la boca de ambas.

Te amo, Calle... — sollozó sintiendo mas y mas lagrimas bajar por sus mejillas —

También te amo, Garzon — susurro Daniela antes de juntas su boca con la de la mas baja, iniciando así un beso. —

Uno que cargaba con muchas cosas, culpa, miedo, perdón, esperanza, dulzura, ternura, pero sobre todo amor...un amor que se había mantenido a pesar del daño, la traición y la distancia. Un amor que tenía posibilidades de resurgir.

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Pamesaurus, esta pequeña historia (No Todo Fue Un Show)  va para ti, con todo el cariño del mundo, gracias por la idea y por dejar esos comentarios que me sacan una sonrisa.

Bueno, nos vemos en la otra chaii

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