Bruno
Habían pasado cuatro largos, aburridos y tortuosos días, desde la última vez que vi y escuché a Nova. No sabía si volvería a verla, si volvería a escuchar sus constantes quejas y reclamos, si volvería a verla perderse en algún privado pensamiento, mientras miraba la luna a través del vidrio de mi ventana. No lo sabia, pero esperaba que sucediera.
¿Desde cuando Nova se había convertido en lo más importante que tenía en mi aburrida vida? No tenía idea, seguro siempre lo fue, pero en el intento de querer protegerla bloquee todos los sentimientos, negándomelos incluso a mi.Esa era la verdad, odiaba la idea de perder a Nova. El no volver a verla o escucharla, me lastimaba, pero si al menos pudiera saber que pudo seguir adelante, lograría estar algo tranquilo.
La alianza que habíamos formado estos últimos días era increíble, podía saber que diría incluso antes de que lo haga y aunque sé que me odia, también sé que es en la única persona que puedo confiar incondicionalmente. Era egoísta de mi parte, pero la realidad es que no estaba preparado para dejarla ir, no ahora.Los primeros dos días creí que lo sucedido con mi padre había movilizado algo dentro de ella, provocando que recuerde todo lo catastrófico de ese día, pero luego recordé haber sentido su olor mientras hablaba con Joanna y la parte masoquista en mi creyó que los celos pudieron hacerse presentes en ella. Luego lo descarté, claramente, Nova podía sentir muchas cosas por mi, excepto celos.
Pero hoy ya estaba completamente desesperado por noticias. Necesitaba saber algo y solo se me ocurría un lugar en el cual podría encontrarla. Claro, sí aún seguía aquí.Pase por el mercado y conseguí una gran canasta de frutas, esa era mi excusa para poder visitar a los padres de Nova, sin despertar sospechas.
Sí, ella era una parte de mi familia, pero hasta ahora, solo yo he venido a verlos. Aunque la razón por la que estoy aquí es ver si ella estaba aquí o no, aprovecharía y vería como siguen emocionalmente.Una vez parado frente a la puerta de la casa, los nervios quisieron aparecer, pero los espante rápidamente y antes de que volvieran a aparecer, golpee la puerta.
Me llevo golpear otras dos veces, para que el padre de Nova abriera finalmente.—¿Bruno? Pasa hijo, que sorpresa. —Marcos Salas, siempre se caracterizó por ser un hombre cordial, al parecer tan diferente a mi padre, por lo menos nunca escuché a Nova decir algo malo en su contra, sino todo lo contrario.
—Buenas tardes señor, lamento si soy inoportuno, pero quise pasar a ver como se encuentran. Me quiero disculpar por no haber podido venir antes, pero he estado muy ocupado con los arreglos en la manada. —era una excusa, la verdad es que me costaba verlos a la cara, cuando sabía que fui responsable de cierta forma de lo sucedido. Fueron mis palabras las que impulsaron a Nova a huir y quedar desprotegida.
—Entendemos que es demasiado el trabajo que hay que realizar y no tienes obligación para con nosotros.
—Nova era parte de nuestra familia, por lo que a ustedes los considero mi familia también. —ellos serían mis suegros, si la situación hubiera sido diferente.
—Pasa hijo, tomemos algo.
Lo seguí, hasta llegar hasta donde Carolina, su esposa, se encontraba sentada mirando un viejo programa de televisión.
—Tenemos visitas amor. —Dice Marcos, provocando que está volteará y me sonriera.
—Bruno, que gusto me da verte. ¿Cómo has estado? ¿Cómo esta la pequeña Mina?
Una cosa que podía comprobar a simple vista es que ellos estaban mejor. Ya no eran las personas deprimidas que vi la última vez, ahora volvían a ser los mismos que siempre habían sido.
Era bueno ver su evolución, aunque sabía que era por dentro que llevaban este gran sufrimiento.—Mina esta preparándose para los exámenes y yo he estado ayudando en la reconstrucción de la manada. Debemos mantenernos ocupados para no pensar en todo lo malo que ha sucedido. ¿Cómo están ustedes?
—Tratando de seguir adelante, aunque es muy difícil. A veces creo que ella sigue aquí, no sé como explicarlo, pero es como si la sintiera. No puedo verla, pero lo desearía, en verdad desearía poder verla al menos una vez más y decirle cuanto la quiero. —me gustaría tanto poder decirle que si la siente es porque Nova en realidad sigue aquí.
Aunque no sentía su olor, por lo que pude darme cuenta que no la encontraría, debería seguir buscándola.
¿Pero donde?—Perder un hijo es la cosa más difícil, ojala nunca debas pasar por eso muchacho. En verdad le pediré a Diosa que nunca te toque afrontar un dolor tan grande. —la sinceridad con la que Marcos hablaba, me hizo sentir como si estuviera clavándome un puñal en medio del pecho.
No me merecía estas palabras, lo único que merecía de ellos era que me echaran fuera de aquí de una patada.
Fui un bastardo con Nova y me odiaba por ello. No podía seguir aquí, la culpa era una mierda, incluso mirarlos era demasiado.—La Diosa no lo permita. Si me disculpan debo volver, pasé rápido, porque en verdad quería verlos, pero tengo que seguir.
—Lo entendemos, pero eres bienvenido a volver cuando quieras.
—Incluso podemos comer algo. Vuelve pronto hijo. —Asentí hacía Carolina, sabiendo que no lo haría muy pronto.
—Me encantaría, muchas gracias por la invitación. —di una última mirada alrededor, sin encontrarla y comencé a hacer mi camino fuera.
Pasé el resto del camino a casa, pensando en donde más podría buscarla. Había tantos lugares y cada uno parecía inútil.
Iba tan concentrado en mis pensamientos, que no me di cuenta que había llegado. Pero cuando lo hice, no pude ignorar a la chica parada frente a mi puerta. Era bueno verla, aunque me estaba sonriendo tristemente.No sabía que le había sucedido, pero lo descubriría, aunque esperaba no ser el culpable. Últimamente solo hacía sufrir a las personas a mi alrededor, aún sin quererlo.
ESTÁS LEYENDO
Rechazada
WerewolfHay dolores que matan, pero los hay más crueles, los que nos dejan la vida sin permitirnos jamás gozar de ella... Antonie L. Apollinarie Fée Portada hecha por @arealunicorn_ Muchas gracias❤❤ Obra registrada en Safe Creative.