Capitulo 21

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Bruno




Con los días pasando, la noticia del nuevo ejercito se fue corriendo, aunque siempre se procuró hacerlo por lo bajo, para que mi padre no se enterara.
No solo éramos cuidadosos a la hora esparcir la noticia, también lo hacíamos a la hora de elegir el lugar donde nos reuniríamos. Cada día era un lugar diferente, apartado, donde casi nunca se veía a mi padre. Si él siquiera sospechaba que estábamos haciendo esto, no tardaría en darnos una lección a todos, incluyéndome.

El que nos preparáramos arruinaría sus planes, sin importarle que estos fueran ridículos.
¿Acaso no se daba cuenta de que cuando Iñaki consiguiera lo que quería, lo mataría? Nadie era esencial, ni siquiera él, pero no lo dejaría volver a lastimarnos. Si él quería morir, debería hacerlo solo.

Observaba como luchaban y evaluaba los puntos fuertes y debilidades, era evidente que a pesar de nunca haber entrenado, eran bastante buenos.
Mientras los hombres se beneficiaban y sobresalían en las peleas cuerpo a cuerpo, las mujeres eran las mejores en agilidad y estrategia. De seguir como hasta ahora, no tardaríamos mucho en convertirnos en una barrera difícil de traspasar.

Pero por desgracia conocía muy bien el ejercito de Iñaki, eran iguales a su líder, sanguinarios y crueles, amaban torturar a los demás, sintiéndose de algún modo superiores. Ellos no iban a detenerse ante nada, pero se llevarían una sorpresa esta vez, ya que nosotros tampoco lo haríamos.

-Te veo muy concentrado. ¿Qué estas planeando ahora? -Miré a Luca y le hice un gesto hacia donde todos estaban entrenando.

-Nada, solo estoy observando como en unos pocos días han mejorado enormemente. De seguir así, lograremos darles una buena pelea.

-Sería mejor si tuviéramos a más personas, pero tienes razón en el gran avance que han dado. Solo tenemos que cuidarnos de no llamar la atención de tu padre.

-Él cree que estoy saliendo con alguien, no sospecha nada hasta ahora. -él había visto a Amanda en casa y creyó que había algo entre ambos. Como esa información era buena para mantener oculto todo lo del reciente ejercito, decidí no sacarlo de su error.

-Eso es una ventaja para nosotros, pero no siempre se comerá ese cuento, tu padre es inteligente. -Asentí, atrapando con mi mirada a Nova.

Ella no podría luchar, pero eso no le impedía seguirme cada día y ver como todos se esforzaban en mejorar. Veía de cerca cosas que yo ignoraba por la cantidad de personas que eran y en la noche, cuando estábamos tranquilos, lo discutíamos a fondo en mi cuarto.
Hacíamos un buen equipo, ahora que no me trataba con frialdad y odio, podía darme cuenta de lo imbécil que había sido al subestimarla.

Nova era inteligente y siempre veía por el bien de todos. Si alguno se lastimaba, ella se preocupaba como si fuera su propia madre, al igual que castigaba a quienes cometían alguna infracción.
Nadie la veía, por lo que de a momentos ella se aprovechaba.

-Pero nos da tiempo y es lo que necesitamos.

-¿Has pensado que haremos con la seguridad en las fronteras?

-Estoy evaluando las posibilidades, no quiero solo mandar a unos cuantos guardias a una muerte segura, debemos pensar en algo más efectivo. -Tenia varias opciones, todas eran algo frustrantes, pero debería elegir una y pronto. - He pensado incluso en buscar la ayuda de Nuria, pero aún tengo un poco de cuidado al frecuentarla, podría llamar la atención y llegar a oídos de mi padre.

-Ella podría ser de mucha utilidad, deberías intentarlo.

Me distraje un momento viendo como uno de los chicos golpeaba a otro por la espalda. Eso no estaba permitido, aún debían entrenar frente a frente.
Pero no me sorprendió ver como Nova caminó hacía él, con una mirada indignada en su rostro y lo empujó, provocando que este cayera de cara contra el suelo.

Muy a mi pesar, no pude resistir que la sonrisa se formará en mi rostro, lo que provocó que Luca me observará y sacará sus propias conclusiones.

-Estas algo diferente. -Dijo cruzando sus brazos.

-¿Diferente en que sentido? -había cambiado mucho, había aprendido, por desgracia, de mis malditos errores.

-No lo sé. Estas menos serio, menos amargado, es como si te hubieran cambiado. Ya no te sientes culpable o triste por lo de Nova y no lo digo para mal, es bueno ver que no sigues con esa actitud miserable que intentabas ocultar. -esa culpa seguía, pero los días con Nova ayudan a cambiar todo eso. -Muchos te han visto con Joanna, ¿Tiene ella que ver en todo esto?

-Joanna es solo una buena amiga, me escuchó cuando necesitaba desahogarme, pero no hay nada más entre nosotros. Hace unas semanas encontró a su compañero.

-¿En serio?

-Ella misma me lo dijo. Estoy feliz por ella y lo estaré cuando tu encuentres a tu compañera.

-Esperemos que sí, mi amigo. -Su respuesta generó bastantes dudas en mi. ¿Por qué creía que no estaría feliz?

-¿Lo dudas?

-No, solo me pregunté si viviríamos para ver ese día. -Él lo haría, no lo dejaría caer en esta maldita batalla. -Si no es Joanna, entonces la muerte de Nova en verdad te afecto. Siento que aunque no lo admitas, eso te motivo a luchar ahora.

Él no lo sabía, pero ella me motivaba a cambiar muchas cosas en mi.
Podía creer que su perdida era un golpe demasiado duró, pero no la había perdido del todo, aún la tenía junto a mi, ayudándome. Porque eso hacía, Nova me ayudaba, a pesar de todo lo malo que había hecho.

Ella a pesar de odiarme se había quedado y ahora estaba intentando llegar a formar una amistad. Era una gran persona, algo que yo nunca podría llegar a ser.

-Lo hizo. Pero sobretodo quiero luchar contra la corrupción de mi padre, no dejaré que vuelva a lastimar a nadie. -su ambición pudo arrebatarme a mi compañera, pero no le permitiría arrebatarme a nadie más.

Voltee hacia el lugar donde ella seguía y la encontré con la cabeza inclinada, observándome atentamente.
Era como si sospechará que hablábamos de ella o quizás solo sintió que la estaba buscando. Sea como sea, podía ver su preocupación.

-Créeme Luca, le haré pagar cada muerte que su ambición ocasionó.

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