Rechazada

Capitulo 33

Nova

Me sentía verdaderamente mal, ellos se habían reído en mi rostro y en el de Bruno. Me hicieron odiarlo al punto de maldecirlo a él, a sus hijos y a los hijos de estos, solo para luego decirme que debería perdonarlo por el bien de la manada.
¿Y qué hice? Fui tan tonta que lo disculpe, me sentí mal al culparlo por errores de alguien más y comencé a ser su amiga, para luego enamorarme y sufrir por no poder estar con él.

—¿Cómo pueden ser tan crueles y jugar así con las personas? —pregunté, sintiéndome decepcionada de ellos. —¿Fingir mi muerte dices Luca? ¿Cómo? Bruno vio mi cuerpo, me enterraron, vi a mis padres caer en depresión al perder a su única hija y ahora dices esto.

—Nova escúchame…

—No Luca, esta vez es mejor que hables. Me importa muy poco que tu compañera sea Nuria y que pueda hechizarme, pero tú eras mi mejor amigo, maldito infeliz, planeaste que Nova me odie, planeaste todo para que la maten. ¿Quién demonios eres? —Bruno paso ambas manos por su cabello, la frustración brotaba de él, como seguramente lo hacia de mi. —Siento que no te conozco.

—Nova esta viva, solo esta hechizada. —confesó Nuria y todo dentro de mi comenzó a hervir.

—¿Hechizada? ¿Hechizada por ti? Voy a matarte Nuria y no será un hechizo. ¡Su maldita broma lastimó a muchos! —grité decidida a cargarme a esta harpía. —Vi a mis padres caerse a pedazos, ¿Qué diablos les hicieron ellos? ¿Entienden lo que es ver a las personas que más aman heridos y no poder consolarlos?

—Nova, escúchanos.

—¡Y una mierda Luca!. ¿Cómo pudiste? Pasé días destrozada sin saber que debía hacer, preguntándome por qué seguía aquí y ahora me dicen que estoy viva. ¿Esperas que este feliz? ¿Qué hubiera sucedido si uno de mis padres consideraba el suicidio? ¿Siquiera lo pensaron malditos egoístas?

—Pensamos en todo Nova. Cuando huiste y fuiste rodeada, aproveche a hechizarte a ti y a los lobos, todos creyeron que habías sido destrozada. Con Luca tuvimos que llevar a una de las verdaderas victimas y la camufle, cualquiera hubiera creído que eras tú, pero solo estabas dormida. Cuando deportaste, bueno ya sabes lo que sucedió. —miré a Nuria con odio, siempre supe que era una basura.

—No imaginas como sufrí el día que nos cruzamos y me hablabas. Fue tan difícil fingir que no te veía Nova. —comencé a carcajearme, esto era simplemente increíble.

—Me imagino, dificilísimo. Tú solo fingías, mientras yo me hundía en un maldito pozo siendo inocente. 

—Solo intentábamos unirlos Nova. — me quedé en silencio, tratando de comprender como no veían el grave error que cometieron. Ellos quizás tenían una buena causa, pero la manera de ponerlo en marcha fue una mierda.

Miré a Bruno, pero él trataba de controlarse, podía ver a su lobo intentando salir.
Respiré profundamente varias veces, pero el instinto asesino seguía ganándole a mi lado racional.

—¿Qué diablos buscaban con todo esto? ¿Fue divertido verme hundirme en la miseria Luca? —las palabras de Bruno estaban cargadas con tanto veneno, que un escalofrió recorrió toda mi columna vertebral.

—Solo intentaba que abras los ojos. Planeabas rechazar a Nova, pero luego de pasar tiempo con ella pudiste ver que no habría una mejor luna para esta manada. Gracias a esto pudiste encontrar la fuerza que necesitabas para vencer a tu padre y salvarnos a todos.

—En esto no debían involucrarse Luca. —negó hacía él, antes de voltear hacia Nuria. —¿Cuánto tiempo más durará este maldito hechizo?

—Puedo revertirlo ahora mismo.

—¡Entonces hazlo! —exigimos ambos.

No sabía lo que Bruno quería hacer, pero yo quería salir de aquí. Si pronto no lo hacía, podía terminar haciendo algo de lo que me arrepentiría más adelante.

—Solo quiero que entiendan que nada de esto fue con mala intención.

—Tengo demasiadas ganas de golpearte Nuria y probablemente lo haré, porque a diferencia de muchas personas, soy demasiado temperamental. Podría entenderte si tu “hechizo de buena intención” no hubiera lastimado a las personas que más amo, pero lo hizo. ¿Quieres decirme cómo me presento frente a ellos y les digo que no morí? ¿Quién me asegura que la impresión no podría matarlos? —Ellos no habían medido las consecuencias de sus malditos actos. —¿Saben siquiera quien esta enterrada en mi tumba?

—Nova, entendemos que estés molesta—Luca intentó acercar su mano a mi, haciendo que me aleje y lo señalé. Como volviera a intentarlo se arrepentiría. —De acuerdo, no me acercaré, pero quiero que lo veas desde mi perspectiva. Mi mejor amigo estaba por cometer el peor error de su vida, solo por miedo a que su padre pudiera romperte. Hice lo mejor que pude para ayudarlo.

—No mientas Luca, esto no es ayudarme. Estos meses han sido un infierno, cada día junto a Nova descubría más cosas buenas en ella, me enamoré de una manera que no creí posible, pero en vez de disfrutar dicho sentimiento, lo padecí. Solo pensaba en como lograr traerla de nuevo—Bruno comenzó a reírse con amargura. —Pero ella nunca se había ido.

Esperé a que Nuria terminara su hechizo, necesitaba volver a ser la Nova de siempre y no esta mujer invisible que ella creó.
Me negaba a comprenderla, no quería hacerlo.

—Esta listo. —dijo pocos minutos después.

Miré a Bruno, miré a Luca y finalmente me concentre en ella. No podía sentirme feliz, por su culpa. No podía disfrutar que estaba viva, porque quería lastimarla del mismo modo que ella lo había hecho.

—No me pidan que los entienda, no hoy. No estoy encontrando a la Nova racional dentro mi, lo intento, pero ahora mismo, solo puedo estar malditamente furiosa.

Cuando terminé de hablar, fue imposible quedarme quieta. Me vi cargando contra Nuria, tratando de desquitar todo este malestar que llevaba dentro.
Todos los momentos malos, las dudas, las lágrimas, en verdad quería lastimarla.

—Vamos Nova, tenemos cosas que hablar. —Bruno me alejo de la maldita estafadora, pero yo seguía soltando patadas y puñetazos al aire, antes de que me subiera a su hombro.

—¡Siempre supe que eras una estafadora Nuria, por algo nunca pude confiar en ti. Ahora veo la razón!. —grité mientras Bruno se acercaba a la puerta.

—Luca, luego necesito que hablemos. Ahora estoy en shock, pero tengo tantas preguntas y debes aclarármelas.

—Lo haré Bruno.

Salimos hacía el exterior y seguía pataleando, no podía entender como no me dejaba que les enseñará a ese par a no jugar con la vida de los demás.
Sin embargo Bruno me ignoraba, solo caminaba conmigo cargada como si fuera una maldita bolsa de papas.