21

61 5 0
                                    


No me jodas! —soltó Yoongi, con la vista clavada en la puerta de la cocina que daba al patio trasero de la casa.

Todos miraron en la misma dirección y vieron a Namjoon con Paulina. Se la estaba presentando a la hermana mayor de Jackson y al novio de esta.

—Eso sí que es una sorpresa —dijo Jackson, despatarrado en el suelo del patio con Kim sentada entre sus piernas—. Sabía que le gustaba, pero no que le gustara tanto.

—Hacen buena pareja —indicó Kim. Le dio un trago a su cerveza e inclinó la cabeza para mirarlos desde otro ángulo.

—Pero ¡qué buena pareja ni qué nada! —exclamó Yoongi—. ¿Soy el único que ve que esta historia no puede funcionar de ninguna manera y que cuando se termine, porque terminará, Namjoon se va a quedar más jodido de lo que ya está? Ustedes no lo conocen como yo. No está bien. Y lo de Taehyung... Ni siquiera ha vuelto al cementerio, se comporta como si no hubiera pasado nada. Cuando explote, Hiroshima será un petardo comparado con él.

Jimin apartó la cabeza del cuello de Sandy, que estaba sentada a horcajadas sobre él, y le dio un golpecito a Yoongi con el pie.

—Está bien que quieras protegerlo, pero es su vida. ¡Pasa del papel de hermano mayor por una noche, amigo, y deja que se divierta!

—Lo que tú digas, Jimin —masculló Yoongi.

—El problema de Yoongi no es esa pija, sino su amiga la rubita... ¿Cómo se llamaba? —comentó Sandy.

—Kina —informó Jackson.

—Esa chica lo pone de los nervios, y cree que por ser amigas son iguales —continuó Sandy—. ¿Os ha contado que nos encontramos con ella en el centro comercial?

¿No? Fue un encanto, en especial con Yoongi. —Miró al chico con una sonrisita burlona—. Lo mejor de todo fue cuando te enseñó el dedo y te sacó la lengua. ¡Está loca por ti!

Yoongi se giró hacia ella con los labios apretados.

—No podrías ser más zorra aunque quisieras —le espetó.

Sandy hizo el mismo gesto que Kina le había ofrecido un par de días antes.

—Eh, amigo, no te pases. Sabes que está de broma —le dijo Jimin, acurrucando a su novia sobre su pecho. Miró a Paulina—. Habría que darle una oportunidad. Y si a Namjoon le gusta...

—Le gusta —aseveró Kim con una risita.

—Yo he hablado un par de veces con ella y no es como esos imbécil del Club —intervino Jackson.

Yoongi resopló.

—¡Okey, déjenlo ya! Me dedicaré a beber y mantendré la boca cerrada. Pero les juro que no pienso despegarme de su culo para ser el primero en decirle «te lo dije».

—Eres un encanto —masculló Kim con tono irónico.

Yoongi adoptó su expresión más inocente y alzó su cerveza hacia ella.

—Vamos, Kim, sé que estás loca por mí. Algún día dejarás al corista de Step Up y acabarás conmigo.

—El corista de Step Up sabe moverse muy bien, y no solo cuando baila —dijo Kim, y agitó sus caderas.

Todos se echaron a reír, incluso Yoongi, que se inclinó y besó a Kim en la mejilla mientras ella arrugaba la nariz con un mohín.

—¿Qué pasa, no puedo dejarlos solos sin que se maten? —preguntó Namjoon con una enorme sonrisa.

Limits- KNJDonde viven las historias. Descúbrelo ahora