Capítulo 3

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Aparte el guion a un lado y tomé una almohada y me la puse en la cara para amortiguar mi grito

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Aparte el guion a un lado y tomé una almohada y me la puse en la cara para amortiguar mi grito.

Esto no puede estar pasando... ¡Esto no puede estar pasando!

Me aparté la almohada de la cara y vi el guion sobre la cama. Todos los post it rojos que había indicaban una escena intensa... ¿una escena intensa? ¿de verdad? Ni las niñas de quince años de ahora son tan recatadas.

¡Escenas sexuales!

Todos los post it rojos indicaban una escena sexual o una escena bien pasional. Cuando llego el guion estaba super emocionada pero mientras iba leyendo iba poniendo post it rojos por aquí y post it rojos por allá.

Conclusión: mi personaje es una ninfómana

Ahora estoy super asustada, voy a enumerar mis miedos.

Uno, ya le conté a mis padres lo de la película, mi padre estaba muy orgulloso, mi madre se limito a guardarse sus comentarios desagradables, que es bastante viniendo de ella. Ahora la cuestión es que tendría que raptar a mis padres cuando la película se estrene en cines, porque en definitiva no van a verme desnuda fingiendo tener sexo con un tipo buenísimo mientras finjo que tengo continuos orgasmos.

Eso es otro asunto ¿Qué clase de mujer tiene tantos orgasmos? Creo que esto lo escribió un hombre, no me parece muy realista. En fin... vuelvo con los miedos, problemas, como quieran llamarlos.

Dos, nunca he hecho este tipo de escenas, jamás de los jamases ¿Cómo se supone que deba hacerlo? Tengo más incertidumbre que cuando no sabía que pasaría con la maldita de Elena Gilbert en The Vampire Diaries y ya sabemos como acaba eso ¿no? Fue un final casi tan malo como el de Game of Thrones.

Tres, todo el mundo en el set me vera desnuda... pero ¿qué digo? Todo el mundo que vaya a ver la película me vera las tetas

Cuatro... ¿hay un problema cuatro? Estoy segura de que si, pero ya lo olvidé.

Lo peor de todo es que no tenia tiempo para compadecerme de mi misma, tengo que ir a los Estudios Beckett a la prueba de vestuario, la que asumo será corta, teniendo en cuenta que mi personaje pasa mas tiempo desvestida que vestida.

Dios mío, esto parece una pesadilla. Respiré profundo tres veces y Sali de casa y me subí al auto. Tenia que controlarme, no era fan de estar desnudándome, pero seamos realista, este trabajo puede ser mi salto a la fama, solo tenia que mentalizarme y no hacer mas grande el problema de lo que era, solo es trabajo. Solo trabajo... por dios, lo mismo dirán las actrices porno.

Dios mío, mi madre como se entere dirá que soy una actriz porno, me desheredara, aunque no es que haya mucho que heredar. Sacudí la cabeza para alejar todos esos pensamientos, no era quien para juzgar a nadie y tampoco debía hacerlo conmigo misma. Es un trabajo y se acabó, has visto esas escenas en miles de películas y te encantan, ¡así que actúa como una profesional! Me regañe mentalmente. Encendí finalmente el auto y trate de actuar con normalidad, como siguiera teniendo una crisis existencial dentro del coche mientras golpeaba el volante seguro los vecinos me tildarían de loca, es lo que menos necesito a estas alturas.

Luces, cámara y otras adicciones (Insaciables I) - TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora