Sangre Ardiente

12- Escalofrios

(Este capítulo contiene escenas subidas de tono)

Akaza había tumbado al pilar en el suelo poniéndose sobre el mientras lo veía fijamente. Kyojuro intentaba calmarse pero le resultaba imposible con aquel demonio tocándolo tan lujuriosamente. Las caricias que recibía le revolvían el estomago, estaba comenzando a caer por sus instintos mas profundos.

Kyojuro: Estas loco...

Akaza: Estamos (le sonreiría coqueto)

Akaza pasaría por ultima vez sus manos sobre el pecho del pilar para después comenzar a desabrochar los botones de su traje de cazador. Kyojuro voltearía a ver a Akaza algo nervioso y sonrojado.

Kyojuro: ¿Qué haces?

Akaza: Tu uniforme me estorba (batallando para desabrochar los botones)

Kyojuro: ¿Cómo que te estorba?

Akaza: ¡Maldito traje!

Akaza estaría un poco desesperado por lo que terminaría rompiendo la parte superior del traje del pilar.

Kyojuro: Akaza... ¡Eres un animal!

Akaza: (sonrisa nerviosa) No soy bueno con los botones (estaría un poco avergonzado)

Kyojuro entendería lo que Akaza decía ya que el demonio apenas si se cubría el pecho. Al pilar le daría mucha ternura ver como el demonio no podía realizar algo que era tan simple para el.

Akaza: Oye... Perd- (interrumpido)

Kyojuro: Eres muy lindo

Kyojuro se taparía la boca con una mano ya que acababa de hablar sin siquiera pensar, eso le pasaba por ser extremadamente honesto. Después de haber hablado el pilar notaria un pequeño rubor en la cara del demonio. Akaza cubriría rápidamente su cara para que el rubio no lo viera, ya que lo acababa de inundar un sentimiento que lo hacia sentir vulnerable.

Kyojuro: Akaza... ¡Akaza déjame verte!

Akaza: ¡NO! ¡Voltea a ver a otra parte!

Kyojuro: ¡Déjame ver!

Akaza: ¡No!

Kyojuro: ¡Que si!

Kyojuro usaría su peso para girar y colocarse sobre el demonio que cubría su cara con ambos brazos. Ahora que se encontraba sobre el demonio pudo tomar sus brazos y retirarlos de su cara. Akaza cerró sus ojos ya que le daba pena que el pilar lo viera en esa forma tan vulnerable.

Kyojuro: ¡Estas rojo!

Akaza: ¡No es verdad!

Kyojuro: ¡Estas experimentando reacciones humanas!

Akaza: ¡No es así!

Kyojuro: ¡Puedes ser igual a Nezuko!

Akaza: ¡YO SOY AKAZA LA TERCERA LUNA SUPERIOR! ¡No tengo reacciones humanas!

Kyojuro soltaria las manos del demonio para tomar su rostro.

Kyojuro: Tu puedes cambiar...

Kyojuro se acercaría al rostro de Akaza dejándolo sin palabras por los nervios. El pilar juntaria los labios de ambos sumergiendolos en un suave beso. Por primera vez Akaza experimentó lo que se sentía ser vulnerable, pero no le desagradó experimentarlo junto con el pilar. Kyojuro comenzaría a pasar sus manos por el pecho del demonio, lo haría como un instinto. Al quedarse sin aire se separarian del otro y se quedarían callados unos segundos.