Mi hermosa piedra preciosa por favor cuídate, que hemos vivido un infierno cuando te creíamos...
-Tranquilo, Bautista tarde o temprano se enterará que estoy viva, y yo necesito viajar a Italia.
-Todos fueron unos desagradecido contigo. -Recrimina con la mirada a Lorenzo.
-Todos no, él y su esposa fueron quiénes me defendieron y me ayudaron, con respecto a Lucrezia no le tomo a mal que no haya reaccionado ante las palabras dura de su nieta porque estaba muy afectada con lo que había vivido su hija y todo lo demás. Y quiero conocer a Gema, tengo muchos motivos para viajar.
-Prometeme que volverás. -Dice Bautista.
-Bautista este es mi hogar, aquí está mi familia, ¿adónde quieres que vaya?Después de prometer que volvería, que llamaría cada dos horas y que sería un viaje de no más de una semana es como emprendí el viaje de regreso al lugar que pensé que no volvería.
Estamos en el avión, Lorenzo sentado a mi lado y Frank enfrente. Vamos sumergidos en nuestros pensamientos.
-Nosotros somos tu familia, también. -Dice de pronto Lorenzo.
-Agradezco tus palabras y estoy segura que así lo sientes pero lamento decirte que no es así para los demás integrantes.
-Mi hermano te ama, mi abuela te quiere como si fueras una nieta más, mis padres...
-Lorenzo hagamos de este viaje lo más plancentero posible, vengo a ver a Lucrezia y conocer a tu hija, para los demás siempre seré un motivo de sospecha. -El resto del viaje lo hicimos en silencio, él sabe que lo que dije es verdad.Al aterrizar nos espera cinco camiones, solo bajé del avión cuando Frank me dió avisó que era seguro, mientras tanto le llamé a Bautista para avisarle que arribamos sin contratiempos, al llegar a la mansión hay un silencio no se parece en nada de lo que era cuando yo vivía.
-Mi abuela te espera en su habitación, yo le voy a pedir a una de las chicas que suba el desayuno.
-Gracias. -Sin esperar un minuto voy me quedo frente a la puerta toco y entro. -Buenos días...
-¡Hija! ¡Hija! ¡Hija! ¡Hija! ¡Hija! -Me arrodillé frente a ella para abrazarla, el abrazo duró mucho tiempo. -No sabes lo mal que estuve...
-Ya me dijeron que no comía ni sale de aquí pero lo que no entiendo es por qué no le habla a su hija.
-Me mintió.
-Por sus cuatro hijos, ¿qué no haría usted por ellos?
-Todo.
-¿Hasta amenazar a sus yernos con el bastón para salvarle la vida a la persona que creía que le podía ayudar para descubrir la verdad? Vamos Lucrezia que todo lo que hizo la señora Fabiola fue para proteger a su familia, haga que todo haya valido la pena.
-Pero tu te fuiste...
-Me fuí porque aquí ya no pertenezco, pero voy a venir a visitarla todas las veces que pueda y usted puede hacer lo mismo.
-No será lo mismo.
-Ay Lucrezia es lo mejor para todos.
En eso se abre la puerta entra Emilia con una hermosa niña, nos dimos un abrazo fuerte y luego tomé a la niña en mis brazos.
-Perdón Lucrezia pero no pude contener más mis deseos de abrazar a Giuliana. Además le solicite a una de las chicas que traiga el desayuno.
-Reunete con nosotras. -Dijo la mujer. Una vez que nos quedamos solas comenzamos a desayunar las tres y la niña duerme en la cama de su bisabuela.
-¿Cómo estás? Lorenzo me dijo que tenías muy comprometido tus pulmones. -Comenta Emilia.
-La verdad que cuando me ví atrapada entre el humor en mi departamento y el fuego en las escaleras pensé que había llegado mi hora.
-Gracias a Dios que estaban esos hombres. -Dice Lucrezia.
-Tienen mi respeto y agradecimiento de por vida fueron muy inteligente... -Me suena el celular atiendo sin mirar el número y dice. -Si queres verlo vivo tendrás que entregarte. -Corta la llamada.
-¿Qué sucede? -Preguntan las dos voy a responder pero me llega un mensaje miro Fabricio está muy golpeado.
-Sabes que estoy viva. -Les respondo sin dejar de mirar el teléfono.
-¿Cómo? -Pregunta Emilia mientras toma su celular y marca un número y dice. -Ven de inmediato a la habitación de tu abuela.
-¿Qué pasa hija?
-El hijo de puta de Rogelio tiene a Fabrizio, me pide que me entregue
-No pensarás entregarte. -Dice Emilia.
-No, pero tengo que pensar en algo para poder salvarlo sin tener que exponerme yo. -¿Cómo lo harás? -Pregunta angustiada Lucrezia.
-No lo sé.
-Yo voy a llamar a Lorenzo, cuidan de Gema. -Dice mientras se dirige a la puerta.
-Si hija, lo único trata esto con discreción.
Ella se fue, y no presto atención a nada de lo que hablan, Fabrizio ha recibido muchos golpes, ¿cómo voy a salvarlo? si nadie a dado con el paradero del viejo de mierda ese. Estoy caminando por el dormitorio de Lucrezia cuando me detengo en la foto de su hija Fabiola, en eso se abre la puerta y dice Lorenzo.
-¿Qué sucede?
-Cierren la puerta. -Indica Lucrezia, me giro y veo que se ubican en los sillones individuales Lorenzo y Renzo y en el grande Emilia junto con Lucrezia que no esperó un segundo para informarle la situación.
-No estarás pensando en entregarte. -Dice Renzo, no respondo miro el retrato de Fabiola y lo tomo con fuerza al recordar una frase que siempre lo remarca ella "¿cuál era la debilidad de la del hombre de la oscuridad?" Y eso se me dio una idea. Me giro abrazando fuerte el cuadro y respondo.
-No, pero debo salvar a Fabrizio.
-¿Cómo? -Pregunta angustiada Emilia.
-Aun no lo sé... -Suena mi celular, entra un mensaje.
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La Reina del Engaño
AcciónUna mujer es intensamente buscada nada más ni nada menos que por dos jefes de la mafia, los más temidos y odiados. Ellos no buscan cualquier mujer la buscan a ella, quién despertó la ira de los dos, buscan a la Reina del Engaño. ¿Qué habrá hecho p...