La Reina del Engaño

Capitulo 6

Comienzo a despertar y la verdad que me siento mucho mejor, prácticamente no me duele mi cuerpo, y casi puedo tener abierto mis ojos, eso significa que debe estar desinflamado, hay una luz tenues en la mesa de luz y observo todo el lugar, estoy en un dormitorio sencillo pero acogedor.
-¿Es de tu agrado? -Giro mi cabeza en dirección de dónde proviene la voz y me encuentro a Vitto, si no mal no recuerdo.
-Lo es. -Respondo, intento sentarme pero ese movimiento me provoca algunos dolores. -Aaaayy. -Regreso a la posición que me encontraba, acostada boca arriba.
-Si quieres te ayudo a que estés cómoda.
-Te lo agradecería, no será fácil hablar sin verte la cara.
-Al grano.
-No creo que estés velando mi sueño por el solo hecho de hacerlo.
-Es cierto, el médico me dijo que despertarias pronto y por eso me senté pacientemente a esperar.
Se acercó a mi y me ayudó a sentarme, acomodó algunos de los almohadones y apoyé la espalda en ellos, el regresó a su lugar.
-¿Qué quieres saber? -Pregunto.
-Todo.
-¿Por qué debería hacerlo?
-¿Porque te salvé la vida? Es una buena razón, ¿no?
-Y te lo agradezco, pero no lo entiendo ¿por qué?
-Porque me lo pidió una persona.
-Te estás enfrentando al Señor de la oscuridad.
-Ya solucioné todo con él, mientras estés aquí no podrá tocarte un pelo.
-¿Cuándo me vaya?
-Tu no irás a ningún lado.
-¿Estoy secuestrada?
-¿Te sientes secuestrada? -Dice mirando la habitación.
-No... la verdad que no, pero no te entiendo.
-No te irás hasta que podamos solucionar tu situación.
-¿Por qué lo haces? ¿Por qué te enfrentas a los De Angeli?
-Porque no creo esa promesa de paz que simbólicamente han firmado Rogelio y mi padre. -Lo veo sincero y por eso decido contarle todo lo que quiera saber.
-¿Qué quieres que te cuente?
-Podrías comenzar respondiendo ¿quién está frente a mi Giuliana Grimaldi o Gema Figueroa? -Al oír el nombre Gema Figueroa me provocó múltiple sentimientos, tristeza, sorpresa, añoranza y mucho miedo.
-Hace mucho que dejé ser Gema, así que supongo que soy Giuliana.
-Bien, ¿cómo es que te convertiste en la reina del engaño?
-¿Perdón? ¿De qué hablas? Mi tío me dice Reina porque soy su única sobrina, pero nada tengo que ver con lo que dices.
-Sin rodeo cuéntame tu historia. -Exige a punto de perder la paciencia.
-A los 12 años nos fuimos a vivir con mi tío y comencé a visitarlo al taller, en mis ratos libres lo ayudaba y en las vacaciones trabajaba con él, necesitaba reunir dinero para lograr estudiar y crear mi propia agencia de eventos, cuando tenía 15 descubrí que andaba en malos pasos y lo obligué que me enseñará todo lo que sabe y así lo hizo. A los 18 me fui a Buenos Aires y nada de lo que soñaba estaba sucediendo, así que le pedí a mi tío unos de sus contactos y así es como comencé a trabajar indirectamente con el señor de la oscuridad. Aunque fue mi decisión no quería vivir toda mi vida trabajando en eso, así que en el último encargo, le entregué una réplica del cuadro que teníamos que robar y luego le vendí otra réplica a un coleccionista, que le dicen el Dragón.
-¿Si le vendiste al coleccionista por qué engañaste al señor de la oscuridad?
-Porque todo el dinero que juntara me serviría para mí plan.
-Continua.
-Al llegar aquí inserte en la base de dato de un convento los dato de Giuliana Grimaldi y así tenía respaldo por si alguien buscaba información sobre mi.
-¿Cómo llegaste a la vida de lo De Angeli?
-Me contrató para que organizara un evento ahí conocí a Renzo, fue insistente para concertar una cita y luego con sus detalles me conquistó, en menos de un año me casé y nuestro matrimonio duro poco tiempo.
-Lamento informarte que tú matrimonio fue falso.
-¿De qué hablas?
-Que nunca existió.
-¡YO FIRMÉ EL DIVORCIO!
-Seguro que...
-Firme unos papeles, Renzo fue personalmente... Si no fue los papeles del divorcio, ¿qué firmé?
-No lo sé pero lo voy averiguar. Ahora descansa.
-¿Por qué me ayudaste?
-Porque no soporto que traten a las mujeres como lo hicieron contigo. -Aunque sé que no es del todo verdad le dije.
-Gracias, aunque supongo que esperas algo de mi, ¿verdad?
-Si, honestidad, que seas Giuliana y no la reina del...
-¿Por qué me llamas así?
-Haz engañado a dos poderosos líderes de la mafia italiana. Otro día te contaré con detalles.
-Tu pides honestidad y yo hago lo mismo.
-Y lo haré pero necesitas descansar.
La verdad que tiene razón estoy muy cansada y necesito recuperar fuerzas para volver a mi departamento y a mí agencia.
Me tiene algo inquieta no saber si el haber sido salvada del señor de la oscuridad, ahora le debo mi vida al diablo.
Por lo pronto me siento a salvo y para mí situación no es poco.