Capítulo 17 Un rato sola

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Cómo siempre decía las clases de la academia eran sencillas y divertidas. Solo que en mi caso tenía problemas con una materia. Defensa personal.

No me gustaba atacar o golpear a las personas, me sentía mal cuando lo hacía, pero el profesor de esta clase me insistía que lo haga, casi todo el tiempo pero me era imposible.

- Bueno alumnos hasta la siguiente clase, ya pueden retirarse a almorzar. - dijo el mientras rebuscaba entre sus documentos. - excepto usted señorita Manrique.

- A mi. - era la única con ese apellido en la clase era obvio.

- Si a usted. -saco una hoja y me la entrego. - dele esto a su representante a cargo es un reporte sobre sus bajas notas en esta materia y un plan de mejoramiento. Firmado para el lunes.

Y era una de las primeras veces que me mandaban una nota de esta clase, la tome de mala gana y me fui. No pude ni comer sólo observaba la hoja sin poder comprenderlo.

- Lucia vas a hacerle un agujero a la hoja deja de mirarla. - dijo Valeria.

- Al menos que tenga visión de láser si. - dijo Denisse.

- Lucia tu abuela te entenderá. - dijo Valentina.

- Es verdad creo que comprenderá el por que de esa nota. - dijo Francisco.

Esos eran mis amigos tratando de animarme, ellos voltearon su miradas a Alex, quien estaba jugando en su nuevo celular.

- Alex. - dijo tociendo Denisse.

- ¿ Qué?. - dijo este levantando la mirada de teléfono.

- No vas a decirle nada a Lucia. - dijo Valentina.

- Ah si si... Lucia no te preocupes es solo una nota, yo he recibido cientos. - lo mire confundida, no entendi lo que me quiere decir.

- Lo que quiso decir es que el a recibido notas en otras materias peores que la tuya. - dijo Francisco.

- Alex no es buen alumno, por eso su única materia preferida es defensa personal. - dijo Denisse.

- Corrección si fuera mal alumno ya me hubiera quedado de año. - dijo Alex mientras volvía a jugar.

- A mi una vez me mandaron una nota y era porque casi me quedo. - dijo Denisse. Me estaban asustando.

- No es tan malo, peor es que repitas el año y te hagan ir a cursos de refuerzo. - dijo Alex.

- En serio no me ayudan. - dije molesta.

Subí a mi habitación y me encerré en ella, estaba molesta, no podía hacer nada bien, era mala en la materia que se supone era la más sencilla de todas.

- Soy un desastre. - dije golpeando la pared, pero no me dolio. - quiero que todo se detenga un momento.

Por un momento se oyó un silencio total, era raro. La ciudad siempre es ruidosa y más un campus con miles de estudiantes.

Bajé las escaleras directo al comedor, los chicos estaban ahí pero no se movían.

- ¿Hola?. - dije en voz alta. - Hey chicos, Valeria, Valentina. - las trate de mover pero estaban quietas. - Alex ... Denisse, Francisco podrían dejar de jugar conmigo saben que no estoy de humor.

Pero no obtuve respuesta; corrí a la salida, había alumnos en el campus pero todos estaban igual que mis amigos, quietos e inmóviles.

- ¿Pero qué sucede?

- Deberíamos usar más el cerebro. - dijo alguien atrás de mi, su voz se me hacia familiar. Voltee a verla, era una chica cabello castaño con mechones violetas. Era igual ... que yo pero con el pelo pintado.

- ¿quién rayos eres tu? - dije asustada.

- Soy tu.

- ¿Eres yo? - pregunté confundida.

- No me digas que ya no te acuerdas de mi, que poca memoria Lucy. - dijo riendo.

- Realmente no me acuerdo de ti y ¿como eres yo?

- A los 4 años eras una niña solitaria,sin nadie con quien jugar, así que me inventaste. Soy como tu amiga imaginaria.

- Ya me acorde de ti, y ¿por qué está ahora?

- Te sientes sola por lo que acaba de suceder.

- Tu sabes que sucedió?

- Si tu no lo sabes peor yo.

- No me acuerdo que nombre te puse.

- Me pusiste Mala.

- ¿En serio? Ese nombre es ... ridículo.

- Tampoco te acuerdas el por qué del nombre.

- De eso si me acuerdo, eres mala siempre te gustaba molestarme por eso deje de imaginarte.

- Qué bueno saber que si recuerdas algunas cosas.

- Debo estar loca para hablar conmigo misma.

- Si y ¿que piensas hacer?

- No se todo es raro, Alex y los chicos están quietos y al parecer el mundo entero también.

Estaba hablando con un producto de mi imaginación, aunque al menos no me sentía sola. Recorrimos unas calles cerca de la academia, todos estaban paralizados, ¿así iba a ser toda la vida? ¿iba a morir sola y triste? Bueno no tan sola tenía una amiga imaginaria.

- ¿Y te gusta Alex? - ¿ en serio ? Otra persona que me preguntaba lo mismo.

- Eso no es un asunto que deba hablar conmigo misma.

- Te encanta. - se río en mi cara. - ya dile que si. Dice que yo soy mala pero eres tu la mala, ese chico esta detrás de ti como perrito.

- No digas eso, quiero a Alex pero no entendería mis razones. Crei que tu las entendías.

- Yo no se nada si tu no me lo dices.

- Pero tu sabes porque es.

El sol caía, me senté en el campus, ¿en serio iba a quedarme sola?. Evite intentar llorar pero se me escaparon lágrimas. Era la primera vez en dos años que me volvía a sentir sola.

- No quiero estar sola, quiero que todo regrese a la normalidad. - y me eche a llorar.

Nunca iba a tener novio, nunca me iba a graduar o poder trabajar.

- ¿Por qué lloras? - dijo Alex.

Me gire y ellos estaban parados mirándome preocupados.

- chicos... - grite de emoción, abrace a cada uno de ellos y me quede en los brazos de Alex. - tenía miedo.

- Pero no ha pasado nada. - dijo Denisse confundido.

- Lu es por lo de defensa personal ¿verdad? - dije Alex obligándome a verlo a los ojos. - Perdón por mi actitud, debo ayudarte como el amigo que soy.

- "Amigos". - Hablaron todos al mismo tiempo.

- Alex no... sucedió que...

- Soy el mejor de la clase en defensa personal, te puedo ayudar.

Pero yo no entendía, ese día paso algo de magia. Pero qué hacer si yo no lo sabía aún.

Ese día hice algo inconscientemente, llame a la que sería mi peor pesadilla.

- Te tengo.

fantasía de chicasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora