No sabia nada de magia ni hechicería o lo que sea, eh ahí mi dilema. Pero todavía no me lo creía yo no era humana, algunas cosas no me cuadraban, ¿quién era yo realmente?
Jalaba mi brazo y era completamente inútil. Y cuando menos esperaba mi brazo se soltó y caí en el piso, mi espalda comenzó a dolorme. Odio educación física. Así que el ejercicio físico y yo no nos llevamos bien. Monica se fijo en mi caída, me levanté rápido.- Veo que si sabes un poco.
- No quiero luchar en serio soy mala para esto. - trate de justificarme.
- Ya deja de hacerte la niña asustada y pelea, enséñale lo que has aprendido en unos meses de defensa personal. - apareció de la nada mi queridisima amiga imaginaria Mala.
- Pero como quieres que lo haga si ni siquiera tengo buena nota.
- Solo escúchame a mi has todo lo que yo te diga.
Monica me atacó e hice lo que me Mala me estaba diciendo. Izquierda , derecha, puño, puño, patada. Si hiciera eso en defensa personal seguro me subieran la nota.
A veces podía llegar a ser una persona con muy poca paciencia y más si me obligaban a hacer algo que no me gusta.- ¡Basta! - dije gritando, todos se quedaron en silencio y Monica sólo me miraba atenta. - no tiene derecho a venir a mi casa y venir a ... hacer todo esto.
Ella solo chasqueo los dedos, mi abuela y mis amigos ya no se encontraban pegados y las cosas que se habían caído a causa de nuestra pequeña pelea habían regresado a su lugar.- No entiendo tu no, se supone que no tienes vida.
- ¿Qué le hace pensar que no tengo vida?
- Se supone que eras una chica tímida y solitaria sin amigos y sin padres, sin familia creí que querías dejar todo eso. - dijo Monica confundida. Sonreí un poco triste por aquellas palabras, hubiera llorado o me hubiera deprimido por que lo que decía era real, pero no lo hice, por alguna razón me sentí orgullosa de mi misma.
- Esa era yo, pero ya no soy tímida, ya no estoy sola, tengo los amigos más fantásticos, no tengo padres pero mi abuela es como si lo fuera y tengo familia, mis amigos son mi familia. Familia no sólo es la de sangre, también es la de corazón y mi corazón está aquí con ellos. - corrí hacia los chicos cada uno me abrazó. Monica se había quedado callada.
- Tus amigos son humanos. - me replicó.
-Los quiero de todas formas.
- Y nosotros también la queremos aunque sea hechicera. - dijo Alex mientras me sonreía. Ella aplaudió.
- Eso es lo que quería ver. Me has enfrentado y demostraste tu valor, eso es lo que hace un hechicero y has defendido tu palabra, te admiro y aunque crea que debes ir conmigo, te dejare aquí.
- En serio, gracias.
- Nos veremos pronto Luciana. - y desapareció.
Todo había vuelto a la normalidad, solo que no todo sería normal, resultaba que era hechicera. En la sala estaba en completo silencio, se suponía que tenía que hablar con mi abuela.- Lucia... - dijo mi abuela. No fui capaz de mirarla a los ojos, me sentía traicionada.
- No entiendo ¿por qué? - dije entrecortado, estaba evitando llorar.
- Tenía un pacto de silencio con tu mamá. - dijo ella nostálgica. - le prometí que no te diría, cuidar a un niña hechicera podía ser peligroso y difícil y más si no había nadie que te enseñe magia te podías hacer daño. Pero tu nunca mostraste ningún rastro de tus poderes, así que no tenía que preocuparme por eso, intente protegerte. Cada día que pasaba me daba cuenta que en algún momento ibas a tener que saber la verdad y tal vez te iba a costar asimilarlo, aunque no contaba que Monica llegue y te lo diga. Lo siento mucho pequeña, no quería escondertelo.
ESTÁS LEYENDO
fantasía de chicas
Romance¿Una vida de soledad o una vida con personas? Mi nombre es Lucia soy una chica mmm ... no muy normal no por la razón que ustedes creen, primero soy hechicera creo que la única en este mundo humano. No tengo amigas, ni amigos, bueno tal vez un día s...