Padre de Mentira [COMPLETA] (FDM #1)

Epílogo

Travis

—¿Cómo que te quieres ir a vivir con tus abuelos? —pregunta mi madre, confundida.

Tras huir despavorido de mi propia casa, fui a visitar a mis adorables vecinos, los González. Son una pareja de ancianos que viven en la otra calle y siempre fueron muy amigables con mi familia.

Como sabía que los demás no tardarían en ir detrás de mí, cuando vi la fachada de su acogedor hogar, llamé a la puerta y les dije que había salido de casa sin las llaves. Me dejaron pasar sin pedirme explicación alguna y me ofrecieron té y galletas.

Con comida en el estómago, logré calmarme y pensar bien en todo lo que pasó durante la última hora, así como también analicé la situación con cuidado.

Después de mucho deliberar, me di cuenta de que no puedo quedarme en Esden. Seguir viviendo aquí implicaría ver a Hailey y a Emma todos los días, cuando es lo último que quiero hacer. Ya tuve suficiente de esto.

Suspiro con incomodidad al mismo tiempo que paso una de mis manos por mi cabeza, despeinándome en el proceso.

—Así como escuchaste, mamá —confirmo—. Ya saben la verdad: yo no soy el padre de Embi, Trevor lo es. No quiero quedarme en esta ciudad repleta de mentirosos.

Mis padres intercambian una mirada tensa tras escuchar mi respuesta.

Cuando llamé a mis padres para decirles que estaba en casa de los González, les prometí que les explicaría lo que pasó apenas todos los invitados se fueran de nuestro hogar. Y así lo hice.

Se escandalizaron al enterarse de que les he estado mintiendo por ocho meses, pero se molestaron el doble al saber que el padre biológico de Embi es Trevor. Nos reprendieron a ambos, obviamente, pero la mayor parte del regaño recayó en él.

Mi hermano mayor trató de abordarme después del regaño, pero yo lo evadí todo el tiempo. No me interesan sus disculpas ni sus excusas, ya es demasiado tarde para arrepentirse.

—Miren, los amo mucho. Mi vida no será la misma sin los regaños de mamá, las bromas con papá o sin molestar a Trina —admito con pesar—. Pero no me siento bien estando aquí. Siento que, fuera de ustedes, no puedo confiar en nadie.

Y ni siquiera puedo confiar por completo en ellos, porque Trevor también forma parte de esta familia, lamentablemente.

Mi madre me dedica una mirada triste y hace una mueca con su labio inferior.

—Trav, ¿estás completamente seguro de que es lo que quieres? —me pregunta.

Suspiro con fuerza, sopesando la respuesta en mi mente. ¿En verdad quiero irme de Esden?

Si me voy, dejaré atrás a mi familia y a la ciudad que me vio crecer. Tendría que empezar desde cero: nueva casa, nueva escuela, nuevos amigos...

Aunque un par de nuevos amigos no me vendrían nada mal.

Sí, irme tiene sus desventajas. Pero tal vez eso es lo que necesito: cambiar de aire, conocer nuevas personas y esperar que la distancia y el tiempo sanen las heridas que llevo dentro.

No puedo seguir viviendo junto a Hailey, o a cinco minutos de la casa de Emma. Necesito superar todo lo que pasó, y no podré hacerlo si me las encuentro constantemente.

Por una vez en mi vida, debo ser maduro y tomar una decisión que me beneficie y no me perjudique.

Le devuelvo la mirada a mi mamá, seguro de lo que voy a decir a continuación.

—Sí, quiero irme de aquí.

—¡No! —exclama una voz aguda y femenina. Sé quien es sin necesidad de mirarla.