Tenía que ir a verla.
Llevaba días sin aparecer por el mirador, ni siquiera sabía cuántos, porque había estado tan centrado en mis nulos intentos por adaptarme a mi nueva vida que apenas había pensado en algo más.
La convivencia con mi tía estaba siendo... complicada. No era fácil que de repente te cambien toda tu vida como la conocías.
Alejan a tu madre de ti y te quedas con tu tía.
No sonaría tan mal si no fuera por el simple hecho de que tu madre está en la cárcel tras haber matado a tu padre y declararse culpable y tu tía es una completa desconocida para ti, pues hacía años desde la última vez que la habías visto.
La última persona que me quedaba era Anne y sabía que le debía una explicación. Sabía que no podía desaparecer así como así, ella no se merecía eso.
Pero... ¿seguiría ella ahí esperándome?
ESTÁS LEYENDO
La chica que amaba las estrellas
Short StoryDaría lo que fuera por escucharte decirlo una vez más que el universo fue creado solo para ser visto por mis ojos. © OBRA REGISTRADA
