—No permitiré que te pase nada, mamá. No permitiré que te alejen de mí.
—Cariño, nadie me podría alejar de ti ni en mil años. Lucharé todo lo que haga falta por permanecer a tu lado —murmuró con los ojos repletos de lágrimas. La posibilidad de que la encerraran entre rejas nos aterraba muchísimo a ambos.
—No podré sin ti... Te necesito —supliqué.
—Y yo te necesito tanto como tú a mí, o incluso más. Por eso vamos a luchar, ¿de acuerdo? —No dije nada—. ¿De acuerdo? —insistió, y no me quedó otra que asentir.
—De acuerdo. —Ella forzó una sonrisa y se colocó la chaqueta americana que llevaba puesta.
—Bien. —Caminó por el pasillo y fue hasta la puerta de entrada, desde donde me miró con determinación—. Ahora vamos. Tenemos un juicio que ganar.
Aunque no las veas, las estrellas siempre están ahí, brillando para ti. ✨
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La chica que amaba las estrellas
Short StoryDaría lo que fuera por escucharte decirlo una vez más que el universo fue creado solo para ser visto por mis ojos. © OBRA REGISTRADA