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Corría por toda la sala tratando de escapar de Sunghoon. Me había tomado su bubble sin que me viese, pero cuando dejé el vaso, él me vio. Y ahora me perseguía por toda la sala.
-Te tengo!-Me dice atrapándome.
-Te compraré otro!-Exclamo. Él suspira y me suelta.
-Noona, te están llamando.-Me dice Niki acercándose a mi con mi celular en mano.
-Gracias Niki.-Despeino su cabello suavemente. Contesto la llamada.- Hola abuelo! Cómo estás?
-Dasha...-Frunzo el ceño.
-Abuelo, qué sucede? Están bien? No les pasó nada?-Pregunto rápidamente.
-Yo estoy bien pero tu abuela no.-Dice.- Hoy en la mañana salió para hacer compras, y cuando iba cruzando la calle, un auto la atropello.-Explica. El mundo se me viene abajo.- Dasha. Tu abuela está en coma, los médicos no saben cuando va a despertar.
-En estos momentos iré para allá.-Digo.
-No.-Me quedo quieta.- Es tarde y no puedes salir en medio de la noche. Quédate, mañana puedes venir. De igual forma, los médicos están realizando varios estudios...Las enfermeras me están llamando, te mantendré al tanto.
Y dicho eso, corta la llamada. Yo me quedo con el celular en mano, mirando a la nada.
-Hemos regresado!-Exclama Jake entrando a la sala.- Heeseung hyung casi se cae en la entrada.
-Se supone que no debías decir eso!-Le dice riendo.- Como sea. Trajimos hamburguesas para todos, así que vengan a comer.
-Comida!-Exclaman los chicos.
-Bonita, tu hamburguesa se va a enfriar.-Escucho que me dice Jay, pero yo tenía la mirada en otro lado.- Asha?-Él se acerca a mi y levanta mi rostro con su mano, sacándome de mi trance.- Qué tienes? Me preocupas.
Yo lo miro y mis ojos se llenan de lágrimas. Automáticamente me aferro a su pecho abrazándolo fuertemente, y sin importarme que los chicos me escuchen, lloro sin consuelo.
-Asha. Dime algo...Qué sucedió?-Susurra Jay abrazándome.
-Mi abuela...Tuvo un accidente.-Digo. Levanto mi cabeza y lo miro.- Está en coma, Jay... En coma!-Grito golpeando su pecho. Jay me obliga a ocultar mi rostro en su pecho.
-Llora todo lo que quieras, no voy a irme a ningún lado.-Exclama abrazándome fuertemente.
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2 de la mañana y yo aún no podía dormir. En mi mente solo pasaba mi abuela. Necesitaba verla, necesito estar con ella.
¿No habrá problema con que me vaya a esta hora? ¿Verdad?
Me levanto de mi cama y agarro mi celular. Salgo de la habitación procurando no hacer ruido y cierro la puerya detrás de mi. Camino hasta la habitación en donde tengo mi ropa y me cambio. Bueno, solo me pongo un pantalón y el primer abrigo que vi, el cual era de Niki.
Me pongo la gorra y me agacho para ponerme la zapatilla. Guardo mi celular y me pongo el barbijo, y ahora si, salgo de la casa.
Se que los chicos me van a regañar cuando vean que no estoy, pero mi abuela es más importante.
Bajo del taxi y camino hacia la entrada del hospital dispuesta a ir a la recepción.
-Dasha? Eres tú?-Frente a mi aparece mi médica.- Qué haces aquí a estas horas?
-Mi abuela, me tiene preocupada y no podía dormir...-Digo tímida.
-Oh. Pero el horario de visita terminó.-Yo asiento.
-Lo sé, pero necesito verla. Por favor.-Pido. Ella me mira y suspira.
-Sígueme.-Automáticamente la sigo hasta cuidados intensivos.- No solemos dejar que nadie entre a cuidados intensivos, excepto al personal del hospital. Pero como ya eres conocida aquí, no hay problema con que veas a tu abuela.
Freno mi caminar al ver que ya estaba frente a la habitación en donde estaba mi abuela. Mi corazón se parte en mil pedazos al verla en ese estado, conectada a miles de cables.
-Tiene una costilla rota y un brazo fracturado.-Dice la médica.
-Porqué está en coma?-Pregunto.
-El choque fue tan fuerte que su cabeza impacto contra el suelo. Tiene una fractura de cráneo y eso ocasionó que entre en coma.-Explica- Hicimos las operaciones necesarias, pero ahora solo queda esperar a que despierte.
-Y cuando es eso?-Ella me mira.
-Solo el tiempo lo decidirá, Dasha.-Ella palmea mi espalda con suavidad.- Tu abuela tenía esto en su mano cuando llegó al hospital.-Me entrega el collar que siempre usaba mi abuela.- Ella es una mujer fuerte, verás que dentro de poco estará contigo...
-Doctora Choi, la necesitan en la sala 2.-Habla una enfermera.
-Quédate el tiempo que necesites Dasha.-Yo asiento y ella se va.
Pongo mi mano en el vidrio y siento mis lágrimas caer por mis mejillas.- Tienes que mejorar, abuelita. No puedes dejarme, no ahora.
Siento unas manos posarse en mi cintura, y por la calidez que transmiten sé que es Heeseung.
-Porqué todo lo malo me sucede a mi?-Pregunto en voz baja.- Ya no quiero sufrir más Heeseung. Ya no.-Susurro. Siento como aprieta su agarre en mi cintura.
-Todo estará bien amor. Tu abuela es fuerte, sé que saldrá de esta.-Me dice suave.- Y tú también eres fuerte, puedes con esto.-Agarra mi rostro y me obliga a mirarlo.- Tú puedes con esto. Ahora vayamos a casa.
-No quiero.-Niego.
-Es tarde, debemos ir a casa. Además, no es horario de visita.-Me dice. Yo vuelvo a negar.- Raina. Mañana podemos venir. Por favor, Osita.
-Está bien.-Heeseung toma mi mano.
-Llegando a casa te prepararé un té. Todo estará bien cielo.-Susurra acariciando mi cintura.
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