El Vampiro & La Bella (Saga Vermont I )

Capítulo 64 (Kaname-Kathryn)

3188 antes-
7629 palabras* 2024

KANAME

— ¿Está todo bien señorita? — Me preguntó una de las chicas encargada de mis cuidados en el reino Vermont.

Ya había pasado tiempo desde el momento que entré al baño, entendía su preocupación, pero dejaba de ver en el espejo, era como si la chica que estuviera al frente de mi, no fuera yo,

¿Cómo era posible que yo fuera ella?

¿Cómo era posible que yo fuera Kathryn Kingerthons?

No, no era posible...

Mis padres...

Era como si hubiera estado embarrada desde el principio en un mundo de mentira.

¿Soy Kathryn y no Kaname?

¿Quién era Kaname?

¿Quién realmente era yo?

¿ a caso era la pequeña niña  que el señor Thomas había conocido de mucho antes; mismo que mató la hermana mayor de esta?

Los sueños que había tenido se vuelven presente en mi mente, ya algunos tomaban sentido, aquella niña que yo veía era yo.

Luego de ponerme mi ropa, era la primera vez que desobedecía a Alice con la elección de la vestimenta que era para mi; quería que usara un hermoso vestido plateado y con piedras rubí en la parte del pecho de forma de decoración, estaba hermoso, pero también se veía muy incómodo.

Me gustaban los vestidos en ocasiones, pero prefería vestido que fueran más cómodo para usar en vez de eso que se veían muy cargado con solo de verlo.

Unos pantalones oscuros, blusa verde, chaleco azul marino que me mantenía muy bien para el frío que hacía afuera; aunque era probable que si tuviera que salir tendría que usar muchas más ropa, pero dentro del palacio estaría bien.

Con botas y peinado listo recogido en una cola alta, salí de la habitación.

— La están esperando en el sector C del palacio, alguien la estará esperando para guiarla — me informa una de las chicas encargada de mi.

Asentí todavía si saber exactamente de lo que ella estaba hablando.

— El rey Thomas me ha ordenado chequearle si sus heridas están bien cubiertas — agrega ella esperando que yo le diera mi aprobación para comenzar a chequearla.

De todos los nombre que he escuchado al señor Thomas llamarle, el rey era una que no me acostumbraba; y ahora resultaba que yo también era parte de la realeza, que ironía.

Le volví a asentí, y ella comenzó a inspeccionar. No me había dado cuenta que me había hecho varias heridas hasta que Amaya fue a mi habitación a vendarlas y aplicarle su famosa medicina. Me sorprendí que no viniera el doctor que me había atendido la última vez, él eras mas amistoso que Amaya.

Había alguien esperándome al bajar las escaleras, este hizo una leve inclinación y me hizo un gesto para que lo siguiera, lo hice. Luego de conducir por los enormes y largos pasillos del palacio, llegamos frente a una puerta, el hombre hizo unos toques una voz desde adentro le permitió la entrada.

Era una oficina, nunca había estado aquí antes, aunque habían muchos lugares en este palacio que nunca había estado; la decoración era negra con plateada, pero había unas cortinas altas y gruesas color rojo que resaltaba más , junto a un sillón que estaba en una parte lateral sin nadie sentado.

Analizándolo mejor, nadie estaba sentado a pesar de que habían asientos. Dentro estaban el señor Thomas, parado en el otro lado de la mesa frente a mi, este no llevaba su chaqueta negra habitual, más bien vestía una ligera camisa negra de lino, dejando los dos primeros botones sueltos.