El Vampiro & La Bella (Saga Vermont I )

Capítulo 57 (Entrenamiento Vermont)

Capítulo 57

KANAME

Ese día, no salí de la habitación en todo el día, por suerte Alice no se encontraba en la casa, y los demás no era que me prestaran tanta atención si decía que esta indispuesta en comer en esos momentos.

Lloré en mi almohada mucho, tenía un dolor en el pecho que no se me podía salir, cada vez que intentaba tranquilizarme, otra vez volvía esas palabras a rondar por mi cabeza, la peor palabra que más me hirió fue cuando dijo "Error"

Para mi no lo había sido y me sentía mal que para él fuera de esa manera, quise olvidarlo todo, pero no puedo negar que había disfrutado tanto sus toques, pero él no sentía nada, yo había sido su error.

Muchas veces Luna me lo había dicho, una relación romántica entre el señor Thomas y yo, solo iba a existir en mi cabeza.

Pero ¿Y ahora? ¿Qué podía ser? Me moriría de la vergüenza verlo en la cara sin recordar sus palabras y me lastimaría mucho verlo besar y tocar a Amaya cuando ya yo lo había sentido tan cerca de mi.

El día que llegó Amaya a la casa, mi corazón se destrozó más de lo que ya pensaba que estaba, porque era un recordatorio que lo que había pasado con el señor Thomas solo fue algo importante y preciado para mi, aunque el final fue el peor. Por suerte no me tuvo que hacer el chequeo anual que ella siempre me hacía, solo para descartar cualquier imprevisto de enfermedad.

Al saber que ella había llegado, decidí dar una caminata por los jardines de la casa, a veces solo lo hacía para poder mantener mi mente lejos de todo, aunque me era muy imposible.

― Te vez inigualable cuando estás callada, ― escuché a Tony hablar.

Tony estaba a poco metros de mi, no me había dado cuenta de cuándo él había llegado.

― Hola Tony ― lo salude.

Estaba sentada en un banco mirando la fuente del jardín, me había quedado un buen rato sentada y pensando en muchas cosas.

― ¿Todo bien? ― Me pregunta.

Le sonreí y asentí con la cabeza.

― No eres de estar callada, ¿Qué te pasa?

― Tal vez debería cambiar ― dije todavía manteniéndome muy distraída.

Tony se sentó al lado mío, yo solo suspiré, el señor Thomas no lo había visto después de ese día; solo esperaba no irme en lágrimas cuando yo lo vuelva a ver, porque me siento mal de ser tan ingenua e idiota.

― Hey Kaname ― me llamó Tony agarrando mi barbilla para que yo lo mirara de frente.

Me sorprendió un poco su toque, pero luego fruncí el ceño esperando que hablara,

― ¿Qué ocurre? ― volvió a preguntar.

― Muchas cosas rondan por mi cabeza, solo es eso ― le dije para tranquilizarlo, ― El señor Pablo me informó que venias con Maicor, pero no lo vi ayer.

Tony apartó su mano en el momento que yo le respondí.

― Pensé que él iba a regresar conmigo ayer también, pero mi abuela decidió otros planes con él.

― Lo extraño mucho ― admití.

― Tal vez viene hoy con Amaya.

― Ya ella está aquí ― mencione sin mucho ánimo, ― y no, no vino con Maicor.

Hubo un silencio.

― ¿Quieres salir conmigo?

Mis ojos se abrieron en sorpresa,