MI OTRA MITAD |《fargexby》

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¡No!- empezó a hablar Rubius. Willy y Vegetta le hacían señas para que no dijese nada, aunque Rubius les hizo caso omiso y continuó hablando- ¡Él se quedará aquí! Ya es mayor de edad, él puede decidir si se quiere quedar o no.

-¿Mayor de edad? Pero si aún es un bebé, claro que no puede decidir qué hacer o no, para eso estamos nosotros sus padres- contestó el señor.

-Claro que no. Y él acá ya tiene toda su vida hecha, ya tiene amigos, amigas, mejores amigos, hasta tiene novios. Ya tiene su vida hecha, es injusto que le quieran separar de su vida. Él ni siquiera quiere ir a esa universidad, él es feliz aquí en Karmaland.

-¿N-Novio?- preguntó su madre.

Vegetta se dio un facepalm. Si es que Rubius siempre termina diciendo cosas que no debe, de verdad que era tontito.

-¿Cómo que novio? ¡Pero si eso es una gran distracción para tus estudios Samuel, ya habíamos hablado sobre esto!- regañó su padre.

-¿Distracción? ¡Pero si sigue teniendo 10 en todo! Y por si no lo sabía, ni siquiera es UN novio, son DOS novios- contestó Rubius haciendo que sus padres quedaran todavía más sorprendidos, en especial su madre- -Y-Y somos nosotros dos.

-Ay dios santo, creo que me voy a desmayar- exageró su madre tirándose al suelo.

-¿Es cierto, Samuel?- preguntó su padre.

-E-Eeem, s-si. Ellos son mis novios, t-te los presento, este es Guillermo y este de acá Rubén- sonrió de forma nerviosa mientras señalaba a los chicos.

-S-Samuel, hijo mío, sabes que apoyamos y respetamos tu sexualidad, pero...¿Un trío?- dijo su madre haciendo una mueca de disgusto.

-¿Qué tiene de malo?- preguntó de nuevo el castaño- Su hijo es probablemente más feliz con nosotros que con ustedes, que tampoco es que nos haya contado muchas cosas buenas de ustedes, eh- el padre de Vegetta miró ofendido y con el ceño fruncido a Samuel- Los típicos padres estrictos que exigen buenas calificaciones y quieren tener el control total de la vida de su hijo, quieren saber TODO y decidir TODO lo que ustedes creen que es mejor para su hijo sin siquiera importarles si su hijo está de acuerdo o si se sentirá bien con ello o no, ¿O acaso me equivoco?-el padre de Vegetta le iba a contestar pero Rubius habló primero- Porque eso está pasando ahora mismo, solo le quieres llevar por sus calificaciones, para que tenga un "buen futuro"- hizo comillas con sus dedos- Y ni siquiera te interesó si él ya tenía una vida hecha o no, no te importó cuestionarte si podría llegar a ser feliz allá, ¿No has pensado que solo te ha dicho que sí o que solo iría allá para no defraudarlos cuando realmente él ni siquiera quiere ir a estudiar ahí?- habló de nuevo Rubius mirando a su padre- ¿O acaso solo le importa que su hijo sea estudioso y no que sea feliz? Porque si ese es el caso, honestamente, que egoísta eres. Te debería de importar más que tu hijo sea feliz, a que sea exitoso.

El señor suspiró de forma molesta y miró a Vegetta con una mirada bastante enojada- ¡Samuel, nos vamos ya, no te quiero volver a ver con este capullo!- comenzó a caminar en dirección al avión nuevamente.

-¿Qué? ¿Acaso no te ha gustado que te digan tus verdades que nadie se había atrevido a decirle?- habló de nuevo Rubius con cierta sonrisa algo extraña.

-Rub, ya es suficien- Vegetta fue interrumpido por su padre nuevamente.

- ¡Agh! ¡¿¡Pero qué coño te pasa!?! ¡Puto niño inmaduro! ¿Quién te crees como para hablarme de esa forma y de cuestionar mi forma de educar a MI hijo?

-¿Inmaduro? Pues al menos soy más maduro que tú como para darme cuenta que Samue- sus palabras fueron interrumpidas ya que el señor le tomó de la camisa bruscamente en un intento de intimidarlo- ¿Y ahora qué intentas?- Rubius le miró burlonamente- ¿Qué? ¿Te crees que me intimidas? Por favor, ¿Qué te crees tú? JAJAJ, si incluso soy un poco más alto que tú.