CASADA CON KIM TAEHYUNG | KTH | saga #3

once

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capitulo once

Salgo del cuarto de baño mientras seco mi cabello con una toalla pequeña, mi cuerpo esta cubierto por una bata de baño, he olvidado mi ropa sobre la cama y cuando entre a la tina recordé que no lo había traído conmigo.

Han pasado días de nuestra boda, siento que el tiempo esta en mi contra porque pasa demasiado lento. He estado aburrida como nunca en mi vida e estado. Me la paso acostada sobre la cama o sentada mirando a la ventana, o simplemente escribo algo.

Aquel día después de las compras, hicimos las compras del alimento, en realidad no me sentí nada cómoda con Taehyung pagando todas las cosas, entre ello cosas necesarias para mi higiene y esas cosas.

Cuando vivía con mis padres no tenía problema, porque tengo mis tarjetas de crédito, tarjetas que mis padres tienen ahora pero están a mi nombre, tengo pensado ir por ellas.

— Hyun Mi, ¿qué tanto estas...? -abre la puerta de repente justo cuando estoy desatando el lazo de mi bata-

Mis ojos se abren del asombro, incluso doy un pequeño salto, Taehyung esta parado con la mano en la perilla, me mira fijamente, aunque no precisamente a los ojos. Aprieto el agarre a mi bata, estoy toda cubierta por la bata pero me siento incomoda sintiendo su pesada mirada.

— L... Lo siento. -aleja su mirada de mi- Venia a decirte que bajaras a cenar.

— Ya bajo. -digo incomoda, el asiente y sale cerrando la puerta-

Suelto un pesado suspiro, tiene esa maldita costumbre de siempre abrir la puerta como si se tratara de su recamara, técnicamente es de él, pero yo duermo aquí, debería tocar antes de entrar. Aquello me molesta pero ahora es más la incomodidad de que me vio en bata, no es la gran cosa, no me vio desnuda gracias al cielo, pero fue un momento muy incomodo, espero aprenda a tocar antes.

Cambio mi ropa a algo cómodo para venir a dormir después de cenar. En estos días las cosas no han mejorado, pero tampoco han empeorado, Taehyung y yo parecemos comenzar a acostumbrarnos al otro, un avance, por lo menos no nos seguimos gritando.

— Señora Kim, su cena esta servida. -dice la empleada cuando me ve-

— Gracias.

Si, también me voy acostumbrando a que para todo me digan Señora Kim, aun no soy vieja, pero están acostumbrados a llamar así a sus patrones.

Taehyung no me dice nada ni yo a el cuando me siento, él comenzó a comer primero que yo, así que solo me dedico a comer en silencio, la televisión ni siquiera esta encendida, estoy acostumbrándome a todo, entre eso que la casa es muy silenciosa.

— ¡No, espera! -suelto el tenedor cuando lo escucho alzar la voz de repente-

— ¡¿Qué?! -digo de la misma manera, exaltada por su grito-

Lo miro confundida, al querer dar el primer bocado grito y me asusto. Me mira y después cierra sus ojos con fuerza suspirando.

— ¡Sunna! -alza la voz trayendo de inmediato a la empleada- ¿Porqué la comida tiene aguacate? -pregunta molesto-

— Yo... Yo... -habla nerviosa-

— Mi esposa es alérgica al aguacate.

Mire enseguida a Taehyung asombrada, él lo recordó, a pesar de tantos años de que dejamos de ser amigos, nunca olvido que yo soy alérgica al aguacate. Ni siquiera me había dado cuenta de que la comida tenía aguacate. Estoy pensando en muchas cosas que mi cabeza no esta aquí realmente.