CAPÍTULO 11 "¿CÓMO?"

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-Nada. Solo me contaba de como les fue el día de hoy. -Dijo Sam. -Bueno... Yo iré a mi cuarto, nos vemos pronto. Los dejo.

Sam se fue y Caroline me miró sonriendo.

-¿Te regaño por llegar tarde?. -Rasque mi nuca.

-No. -Negó con la cabeza. -Se puso feliz... Nunca creí que él se alegrará más que yo. Parecía un bebé.

-Me lo imagino. -Reí.

-Si... Pero bueno... Me alegro pasar tiempo contigo, de verdad.

-Lo mismo digo. -Sonreí.

Mire a Caroline por unos segundos y ella hizo lo mismo, hubo un silencio que para mí no fue nada incómodo.

-Bueno... Te veo mañana. -Dijo algo nerviosa.

Nos despedimos y Caroline entró a su cuarto, yo hice lo mismo, me recosté en la cama y me quedé dormido.

Narra Caroline
Al día siguiente, fui a la escuela, como de costumbre.
Me tocó la clase de finanzas y entre como siempre, on la diferencia de que note que la maestra me veía de una manera muy extraña, además de que me incomodaba. Pero no dije nada y solo continue poniendo atención a la clase.

-Señorita Harrison, venga. -Dijo mirándome fijamente.

La maestra salió del salón de clase y yo la seguí. Nos quedamos paradas afuera del salón y me sentía nerviosa, no sabía que era lo que llevaría a esa actitud.

-Señorita Harrison... ¿Me puede explicar por qué no asistió a clases el día de ayer?. -Frunció el ceño.

-Pues... Porque tuve un compromiso. -Respondí nerviosa.

-¿Ah si? ¿Con el joven Grimmes? -Me miró molesta. -Los vi en la playa, antes de llegar aquí a la escuela y pensé que vendrian a clases y no fue así.

Yo no respondí nada, solo me quedé callada y no supe que responder.

-¿Si supo que ayer hubo un examen sorpresa? -Cruzó los brazos. -Y lo más seguro es que no pase mi materia.

-Con todo respeto, maestra. Yo tengo la mejor calificación de la clase y me he esforzado mucho para ser una alumna ejemplar y aprender... Además sus exámenes sorpresa no entran en la evaluación.

-Tú no juzgues mi manera de evaluar. Yo me encargaré de que no pases la materia. -Dijo amenazante.

-Eso no es justo. -Dije con la voz cortada.

-Por ahora, vete de mi clase, te veo el jueves para hablar con la directora.

Entre al salón muy molesta y con ganas de llorar, pero me contuve, lo que me hizo que sintiera un nudo en la garganta horrible.

Tomé mi mochila y salí del salón, me fui por el pasillo tapandome la cara para que nadie viera que estaba llorando.
Antes de llegar a la salida, choque con alguien, levante la mirada y era Norman. Que inesperado.

-Hola. -Sonrió. -¿Qué tienes?.

-Nada... Es que... -Solloce. -La maestra me dijo que me fuera de su clase... Porque sabe que ayer no vine a clases por irme contigo.

-Dios. -Rasco su nuca. -Si quieres voy por mi mochila y...

-No, no, no. Yo me quiero ir a mi casa. -Dije interrumpiendo. -Además...

Sin decir más, pase a un lado de de él y me fui a casa.

Narra Norman
A la hora de la comida no podía dejar de pensar en Caroline.

Carlos estuvo hablándome de cosas y yo no ponía atención a lo que me contaba.

-¿Norman?. -Dijo agitando su mano.

-¿Qué?. -Dije mirándolo.

-¿Estas bien?. -Frunció el ceño.

-La verdad no... -Baje la mirada. -Ayer salí con Caroline, como te conté...

-Que aún no me lo creo. -Dijo mientras comía.

-Si... En fin. La pasamos bien, nos divertimos y todo. Pero ahora su maestra la expulsó de su clase por no haber asistido a la clase de ayer.

-Wow. Adivinó, ¿La maestra Powel?

-Ni idea. No me contó mucho, solo me dijo eso y se fue, estaba muy triste. Y no se como animarla. -Dije desanimado.

-¿Qué te parece una cerenata?. -Preguntó con una sonrisa de lado.

-¿Cerenata?. -Frunci el ceño.

-Yo se tocar la guitarra. Y no sé si te guste ir a cantarle una canción.

-No soy un buen cantante. -Reí.

-Eso es lo de menos. De igual forma necesito probar mis enseñanzas de la escuela de música. Haré un cover de esta canción.

Carlos saco una carpeta de su mochila y me la dio.
La abrí y vi la canción.

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