CAPITULO 31

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Golpe doloroso

Al abrir los ojos empiezo a estar conciente del dolor en todo mi cuerpo, no solo en la área del estómago, sino también en cualquier área que abarca mi yo.

Cierro de nuevo los ojos al sentir la intensa luz que entra por la ventana del lugar donde me encuentro, los abro muy lentamente acostumbrándome poco a poco.

Hay tres sombras que apenas puedo distinguir, parpadeo varias veces tratando de distintas esas figuras de diferentes tamaños; La primera que logro identificar es la que está sentada en el sillón frente a mí. Mi vista se aclara poco a poco permitiendo ver a Elizabeth con los ojos oscuros redondos totalmente húmedos e hinchados.

Deslizo la cabeza de lado viendo a mi padre moviendo su pierna constantemente sentado en el sillón cómodo el cual usábamos Mikey y yo cuando veníamos a platicar con Melody. Muevo la mano un poco algo débil y su mirada alarmante de él se clava en mí.

Al tratar de moverme suelto un gemido de dolor que llama la atención de todos los que se encuentran en la habitación. Los tres se acercan a mí casi corriendo rodeando la camilla donde me encuentro y cierro los ojos por un momento al sentir una sensación extraña.

Miro la habitación: el techo, las paredes, la ventana, el exterior, los estantes, hasta que mis ojos se detiene  en mi cuerpo junto con la intravenosa que tengo en la mano derecha. Sigo el camino del delgado tubito transparente hasta examinar el líquido de la bolsa que cuelga del perchero metálico delgado.

Acomodo mi cabeza al frente viendo el rostro de mi hermana y mi padre comprobando que tienen un aspecto fatal, sin embargo cuando veo la de Carl todo en mi interior revolotea y trato de sonreír.

Hasta eso me es difícil de hacer.

—Jennette—la voz de Carl es baja que pareciera tener los oídos en los pies.

Sonrío de lado con debilidad y me quejo de nuevo con discreción. Trago saliva refrescando mi memoria de lo ocurrido y por qué estoy aquí. Solo veo sus ojos azules y busco su mano con la mía. Él la logra encontrar y la aprieto con las pocas fuerzas que tengo.

Me siento como tan débil que si ahora mismo estaría de pie caería con tan solo una brisa.

—Te dije que iba a regresar—bromeo en voz ronca al ver ese aspecto desconocido en él.

Me cuesta hablar también. Mi padre se checa algunos monitores que están a lado de la camilla. Hacen ruidos tan agudos que el sonido sigue sonando fuerte en mi cabeza.

Hago una mueca de disgusto. Miro las sábanas color hueso que me envuelven el cuerpo hasta el pecho, también mis brazos y luego la playera de manga corta color blanca. Mi hermana toca mi pie suavemente para llamar mi atención y la miro con una sonrisa de lado.

—¿Cómo te sientes?

Miro a mi padre y luego a Carl. El chico toca mi cabeza por un segundo.

Jamás lo había visto tan mal.

Denisse se asoma por el marco y detrás de ella Chelín aparece con la expresión tan angustiada casi parecida a cuando Melody salió herida por Pete.

Todos las miramos, al verme, la mujer pelirroja se tapa la boca con ambas manos sin poder creer que ya estoy despierta. Esos ojos encapuchados castaños se abren tan grandes que podría decir que se saldrán de su lugar.

•𝐒𝐎𝐋𝐎 𝐂𝐎𝐍𝐅𝐢́𝐀• || CARL GRIMES || [TWD]                 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora