Cute babyboy - katsudeku

New Boss

Pov normal

Izuku había sido secuestrado hace dos años y medio, se encontraba sobre la cama con la respiración tranquila; después de las incontables torturas proporcionadas por sus padres llego el día en que dejo de quebrarse, ya no había nada que quebrar; fue tan grande el sufrimiento que le proporcionaron que el chico con pecas desarrollo un tipo de trastorno, ahora anhelaba que sus padres entraran a su habitación, le gustaba estar junto a ellos. 

Un inesperado día comenzaron a darle entrenamiento, su madre lo seguía tocando pero era mas suave, su padre era el encargado del entrenamiento y Todoroki era algo así como su pareja, obviamente sin consentimiento del peliverde; lo convirtieron en una maquina asesina dependiente de ellos.

-hola cariño -dijo Inko mientras entraba a la habitación con un teléfono en sus manos.

-hola mama -sonrió mirándola.

-quiero hablar contigo, vamos -tomo la mano de su hijo y lo guio hacia la puerta.

Comenzaron a caminar por el largo pasillo mientras Inko repartía caricias en la mano del menor, como si quisiera tranquilizarlo.

-a donde vamos mama? -Izuku estaba preparado para cualquier ataque sorpresa por parte de su padre e incluso para cualquier jugarreta por parte de su madre.

-tu padre y yo te tenemos una sorpresa -le sonrió de una manera increíblemente dulce.

Cuando al fin llegaron a la puerta que daba a la oficina de Hisashi, estaban los dos guardias de siempre a cada lado de la puerta, en cuanto vieron al ojiesmeralda le dedicaron una ligera sonrisa; el menor se había ganado el cariño y respeto de todos en aquel edificio.

La mujer soltó la mano de su hijo para luego sonreírle de la misma manera que hace unos minutos.

-sabes que te quiero, verdad? -acaricio la cabellera del pecoso.

-lo sé -sonrío feliz- y yo te quiero a ti mama.

-entremos, tu padre debe estar esperándonos -dijo para tomar nuevamente la mano del ojiesmeralda siendo correspondida.

Al entrar Hisashi entro en el campo de visión de ambos, sonriéndole al menor y acercándose.

-hijo mío, te estaba esperando -dijo mientras tomaba el brazo del menor jalándolo y alejando la mano de Inko- ven.

El pelinegro tomo asiento en el sillón mas cercano jalando la mano de su hijo para sentarlo en su regazo.

-me necesitas para algo padre? -dijo Izuku recostando su cabeza en el hombro del mayor para luego sentir como este le daba ligeras caricias en la espalda baja.

-no exactamente, te tengo una gran propuesta -sonrió mirando a la mujer que continuaba de pie frente a ellos y haciendo que Izuku se levantara mirándolo confundido- quieres saber cual es?

El ojiesmeralda asintió emocionado mientras observaba como su madre tomaba asiento en el sillón junto a ellos.

-todavía no te he dicho a que me dedico, verdad bebe? -pregunto ahora apretando los muslos del menor.

-no te gusta que pregunte así que deje de hacerlo, tendrás tus motivos para no decirme -tomo la corbata de su padre y comenzó a jugar como un niño pequeño.

-te estaba educando, aprendiste bien -tomo la mano que jugaba con su corbata para ahora comenzar a jugar él con la pequeña mano- soy el jefe de la mafia, de los Yakuza.

Esto tomo por sorpresa al chico que se encontraba en su regazo quien lo miraba totalmente sorprendido.

-WOW! -grito aún más emocionado el pecoso- ESO ES INCREIBLE PAPÁ! -dio una gran cantidad de aplausos que hicieron al mayor sonreír.

-te gusta la idea de que tu padre sea un mafioso? -se carcajeo el pelinegro mientras recibía un asentimiento por parte de su hijo- entonces te va a encantar la sorpresa que te daré a continuación.

-esta no era la sorpresa? -giro ligeramente la cabeza con confusión- entonces cual es?

-Hisashi yo quiero decirle -miro a su esposo esperando aprobación pero lo único que recibió fue una mirada fría que la hizo desviar la mirada.

-solo te llame para que fueras por mi hijo -dijo enfatizando las ultimas palabras.

-papá? -Izuku interrumpió la mirada que le dedicaba a la mujer, sabia que si no hacia algo las cosas terminarían mal- no entiendo cual es la sorpresa.

El hombre cambio por completo su mirada para mirar ahora a su hijo y sonreírle.

-ahora eres el jefe -sentencio acariciando los verdosos rizos- te he entrenado para que seas mi sucesor.

-eso te hará feliz? -el ojiesmeralda pregunto haciendo que su rostro tomara una expresión totalmente seria mientras veía fijamente los ojos de su padre.

-serias mi orgullo -dijo haciendo que los ojos de Izuku tomaran un extraño brillo que solo veía en los entrenamientos- aceptas?

-acepto -se levanto del regazo de Hisashi sorprendiendo al mayor para luego dar una reverencia- gracias por darme esta oportunidad papá.

El pelinegro soltó una estruendosa carcajada tomando al menor de la muñeca para sentarlo nuevamente en su regazo y darle una abrazo que obviamente fue correspondido.

-solo tengo una pregunta -susurro entre el abrazo Izuku- no dudo de tus decisiones pero crees que estoy listo?

-JAJAJAJAJA! -comenzó a reírse ganándose la mirada de su esposa- no haz notado el nivel en el que estas?

El peliverde lo miro confundido.

-eres la persona mas sanguinaria que he conocido -sonrío- estas más que listo para este trabajo.

-sanguinario eh -dijo separándose del abrazo mirando ahora sus rodillas con una expresión seria.

-vamos a entrenar -dijo Hisashi llamando la atención de su hijo- pero ahora quiero que te concentres en tus acciones sin retener tus instintos.

Pov Izuku

Mi padre me llevo a la habitación de entrenamiento dándome un bate de metal antes de entrar, esta vez no entro conmigo a la arena y en su lugar me dijo que debía esperar en el medio.

-Izuku puedes oírme? -escuche las bocinas a mi alrededor.

-SI! -grite firme esperando respuesta.

-concéntrate de ahora en adelante -dijo mi padre- cuando escuches mi voz de nuevo es por que se termina el entrenamiento, entendiste?

Levante mi mano izquierda con el pulgar arriba.

-comencemos -escuche como las bocinas eran apagadas y las tres puertas que estaban a mi alrededor eran abiertas.

Ahí me di cuenta a lo que se refería papá, una sonrisa comenzaba a formarse en mis labios mientras le daba unas cuantas vueltas al bate en mi mano.

Pude ver el miedo en los ojos de cada hombre a mi alrededor y eso me hacia sentir tan bien, la sed comenzó a hacerse presente.

Minutos después

-Izuku -escuche la voz de mi padre mientras seguía golpeando un cráneo- gran trabajo.

La puerta principal fue abierta, los inconfundibles pasos de mi padre acercándose me hicieron detener.

-ahora lo entiendes? -dijo, me gire observándolo para luego sonreír.

-esto fue el calentamiento, verdad? -note como mi padre sonreía.

-por hoy no tengo más prisioneros, pero si me quieres ayudar a sacarle información a algunos no me quejaría -sonreí al escuchar sus palabras, esto no me había saciado.