V|"Mi cuerpo ha ganado CICATRICES, mi alma HERIDAS y mi corazón ESPINAS, yo solo quiero purgar mi dolor con dulce VENGANZA, caiga quien caiga...."
Verónica Stark tras el abandono fue lanzada al abismo de su propia perdición y de allí nació su deseo...
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La pequeña castaña estaba tratando de escalar la estantería de la bodega, ya que en la parte más alta había encontrado chocolates y galletas escondidas, le llevaría a su amiga Natalia para comerlas en la noche.
Extrañaba a su papá y los dulces le ayudaban a estar feliz de todas formas, porque Natie le dijo que siempre debía estar alegre.
——¿Qué haces?——escucha una fuerte y autoritaria voz a sus espaldas, asustandola por lo que cayó de golpe
Más no se quejó una vez adolorida en el suelo, ese hombre le servía a esa horrible señora a la que no le gusta que ninguna niña emita algún sonido que considere irritante, los cuales eran todos.
Y saltó cuando el ruso se le acercó, cerrando los ojos y cubriéndose por inercia, pero él la ayudó a levantarse como limpiar los restos de polvo en sus rodillas suavemente mientras comprueba que no hubiera heridas.
——¿Estás bien?, ¿Qué hacías encaramada ahí?——murmura y la desconcertada niña baja la cabeza mientras abulta sus mejillas
Él suspiró, ya había visto a Verónica venir escondida a la bodega por lo que había traído más golosinas, así sacó una barra de chocolate para entregárselo a la pequeña, a la que le brillaron los ojos ante el dulce.
——¿Qué quiere a cambió?——murmura Verónica al fruncir la nariz——¿O le dirá a la bruja mayor?——dicecon una divertida mueca de susto por lo que Záitsev rió
——Nada de eso——sonrió fugaz y en reemplazo la melancolía invadió su vista perdida—Sólo quiero que me hables de alguien muy importante para mí
——¿Yo?——murmura la menor ladeando la cabeza mientras frunce los labios
——Leonor, ¿Cómo es ella?
——¿Conoces a Leo?
——Ojalá pudiera——suspira el hombre——ella es mi hija
——¡¿Su hija?!——murmura la niña al abrir los ojos como platos y la boca en forma de una perfecta "O"——¿Y entonces por qué no está con ella?——pregunta Verónica inocente al no comprender
——No me es permitido——se limita a decir el ruso——ojalá pudiera ser como tú y tu padre——musita y la niña nota como su mirada se pierde, y puede ver los ojos de su amiga reflejados en ellos
Así la Stark ya sin miedo por el hombre, tomó su mano y le regaló una dulce sonrisa.
——Leo es muy linda, su cabello es tan negro como el suyo y sus ojos parecen un pedazo de cielo——cuenta la infante emocionada bajo la mirada de un conmocionado Záitsev, el cual trataba de hacerse una imagen de lo que le contaba——ella es muy seria y no habla mucho, como Natie, pero conmigo siempre es muy tierna, además es muy lista y fuerte
