Ata(ra)xia | Yoonmin

Dos

—Ya. Dime qué tienes —eso había sonado más una orden que una pregunta. Taehyung simplemente hizó un puchero y miró a otro lado.

Se le olvidaba que su novio lo conocía mejor de lo que él mismo se conocía. «Es tan lindo», había pensado el pelinegro de tatuajes al observar las caras que su novio hacía.

—Me gustaría decirte "Nada", pero sé que no me creerás —le respondió el castaño de linda sonrisa.

—Entonces, dime... Es por Jimin, ¿cierto? —cuestionó su novio con una ligera sonrisa.

—¿Puedo mentirte? —preguntó, Taehyung inocentemente, haciendo un puchero.

—No.

—Jungkookie...

—Kim Taehyung.

—Está bien, sí, es por ese tonto niño rubio —dijo aquello con un tono de enojo y un nuevo puchero adornando su rostro.

—¿Qué pasó con Jimin? —respondió Jungkook con un tono irónico y de burla.

—Oye, lo dices como si fuera algo normal —agregó Taehyung con cara de enojo, entrecerrando los ojos para lucir intimidante.

—Lo mismo pasa cuando ustedes dos se pelean —le recriminó Jungkook—. Al final del día se reconcilian y vuelven a ser amigos.

—Esta vez, no.

—¿Por qué no? —preguntó Jungkook curioso, prestando toda su atención.

—Eligió a un hombre antes que a mí —comentó el castaño, bajando la mirada, sonaba un poco decepcionado.

—Oh, hablas de él...

—Sí. Le dije a Jimin que lo olvidará, que dejará de buscarlo —volvió a hablar Taehyung—. Simplemente me ignoró, fingió escuchar mi consejo y luego dejó de hablarme.

—Así que, no estás enojado —aquello llamó la atención de su novio, por lo que volvió su mirada al pelinegro—. Estás dolido.

El silencio fue una afirmación. Jungkook conocía muy bien a su novio, sabía que Jimin y Taehyung eran casi hermanos, podía dar por seguro que el castaño amaba más al rubio que a él, y Jungkook no tenía ningún problema con ello, pero en ocaciones Jimin era impulsivo, cuando eso ocurría Taehyung era quien más sufría.

En estos momentos el castaño se sentía mal por no poder ayudar a su amigo, ni siquiera con palabras de aliento o un mensaje de ánimo. El rubio enserio había hecho un buen trabajo ignorandolo.

—Toma tus cosas —dijo el pelinegro de la nada, dejando su tarea de lado.

—¿Qué? ¿Para qué? —dijo Taehyung confundido, viendo como su novio comenzaba a ponerse su calzado.

—Iremos a ver a Jimin.

—Él no quiere verme.

—Entonces vamos de mi parte —dijo Jungkook parando sus movimientos para después sonreír hacia su novio.

El castaño apretó los dientes, frunció el ceño y no respondió, después de unos segundos de silencio habló.

—Kookie...

—¿Sí? —dijo con la mirada aún sobre sus tenis, mientras los ataba.

—¿Y si nisiquiera nos abre la puerta...?

—Lo hará, él es tu mejor amigo, ¿no? —se giró, tomó la mano de su novio y le dio un pequeño apretón.

—Está bien —dijo Taehyung copiando la acción de su novio.