Soy el primero en admitir que no somos el paquete de salchichas más discreto que hay, pero no me preocupa ni un poco que Aiden se dé cuenta de que lo estemos siguiendo todo el día, porque es un imbécil de pelo azul con el coeficiente intelectual de un mosquito ahogándose en una taza de café. La taza está vacía, es solo que no lo sabe y se ahoga de todos modos, porque es idiota. Y feo. Y huele a culo.
—No sé qué tan productivo sea esto, bro —dice Hayden, acuclillado a mi lado detrás de un arbusto frente al 'Parque Motorizado y Comuna Hippy Rueditas Comunistas' al que Aiden llama hogar—. Osea, yo se que dije que lo íbamos a derribar, pero pensé que eso significaba que íbamos a hablar con él y pedirle cortésmente que se fuera a la chingada, no que lo acechariamos y buscar tierra pata chantajerlo.
El parque motorizado es lo peor que Valle Montañoso Nortesur tiene para ofrecer en cuestión de bienes raíces, y también lo más barato, ya que, por alguna razon increíblemente estúpida, los bienes raíces aquí son una locura. Aparentemente, el fundador de esta hermosa ciudad, un tal Athanasius Finch, leyó una vez en una revista que los valores de las propiedades ganan un valor adicional si se encuentran en montañas, valles, o alguna posición cardinal. Trató de trucar el mercado creando una ciudad con valores de propiedad astronómicos con el nombre más caro que pudo pensar y si de alguna manera no eres un campesino sin un millón de dólares de sobra, no podrás vivir decentemente en este pueblo olvidado por dios. Eso podría explicar el número estadísticamente imposible de millonarios en la escuela.
Sin embargo, aquí es donde ese imbécil va a anidar, por eso lo estamos acechando. En cuanto a por qué lo estamos acosando en primer lugar...
—No vamos a chantajearlo —digo, mirando una piedra particularmente bonita en el suelo que se parece a Don Francisco—. Eso sería un crimen, y no somos criminales. Vamos a obtener evidencia de sus payasadas de bad boy y reportarlo a la escuela. En todo caso, somos heroes.
"no, eso te convierte en un sapo soplon", dice Brayden, de pie junto a nosotros. Si bien no es lo suficientemente alto para volar nuestra tapadera, Jungkook y Harry son más que suficientes para volar nuestra tapadera si se trata de eso. Una vez más, no tengo mucho miedo de eso, ya que Aiden tiene dos neuronas que intentan jugar al solitario como un juego de dos jugadores. "y ya sabes lo que reciben los sapos soplones."
—Puntadas —dice Harry con una risita.
Brayden se quita las gafas de diseñador mientras se aplica una cucharada de crema agria en la nariz, todo el tiempo luciendo solo un poco molesto. "no, reciben una bala entre ceja y ceja. no hay ningún sapo soplón que haya visto estar vivo el tiempo suficiente para recibir puntadas."
—Claro, está bien —le digo, agarrando a Don Francisco la piedra y lanzándolo al aire y atrapándola, sensualmente—. ¿Pero puedes ponerte en cuclillas con nosotros? Quiero decir, hay cosas obvias, y hay cosas obvias, y estás siendo ambas cosas.
"chupala. estos son yeezys. no voy a arruinar a estos chicos malos poniéndome en cuclillas en la parte sórdida de la ciudad. de hecho, ¿jungkook?"
—Ya voy, jefecito —dice, arrojándose frente a Brayden, que procede a pararse encima de él como una alfombra carnosa y ligeramente maloliente.
Genial, ahora es más alto.
En cuanto a Okayden, está sentado en una silla de jardín con un paraguas rosa con encaje mientras lee un libro, cubierto de pies a cabeza con una gabardina que me hace sentir que podría en realidad ser tres mapaches fornidos tratando de hacerse pasar por un gótico culon. Por supuesto, está leyendo un libro, sin importarle nada.
—Aún así —dice Hayden, rascándose la barbilla limpia—, no puedo evitar sentir que estamos exagerando un poco.
—La guerra no se trata de pensar si exageramos o no, Hayden—le digo, asegurándome de usar su nombre como una forma de mostrar lo super duper serio que estoy—, se trata de aplastar a tus oponentes, destruir sus fuerzas y su voluntad de contraatacar. Entonces, y solo entonces, ganaremos contra él. El Arte de la Guerra, papá.
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Bad Boys, Soft Boys, y Otros Descorazonados - El Paquete Completo
RomanceCuatro bad boys, Ayden, Hayden, Brayden y Okayden, intentan formar un club escolar para aprender a luchar contra sus instintos de bad boy, o sucumbir a los clichés en el intento. ******* C...